Su Eminencia agregó: «Esa es la primera medida que se debería tomar. Los líderes políticos y militares de ese régimen usurpador deberían ser procesados. Si los criminales son juzgados, se les dificultará el camino que les lleva a ese objetivo y locura.»

El Líder Supremo al inicio de su discurso hizo un breve repaso de la guerra de 33 días de Israel contra el Líbano y la de 22 contra la franja de Gaza, y expresó: «Ahora, cuando el régimen usurpador y sionista ha estado mostrando una imagen de temible e invicto después de varias décadas equipándose de un ejército y con el respaldo militar y político de Estados Unidos, dos veces ha sido derrotado por unas fuerzas de Resistencia que batallaban apoyándose más en Dios y en el pueblo que en las armas. Y a pesar de sus entrenamientos y preparación militar y de sus largos y amplios organismos de Inteligencia y del vasto apoyo prestados por Estados Unidos y algunos gobiernos occidentales y de la complicidad de algunos hipócritas del Mundo Islámico, han aparecido elementos de disolución y una pronunciada caída provocada por su ineficiencia ante una fuerte ola de despertar musulmán.»

Ayatolá Jamenei mencionó algunos de los crímenes cometidos en la Franja por los «criminales sionistas», como la matanza perpetrada contra civiles, la destrucción de hogares de gente indefensa, el disparar a lactantes, el bombardeo de escuelas de primaria y mezquitas, el uso de bombas de fósforo y otras armas prohibidas, el cierre de los pasos de los alimentos, medicinas, combustible y otros artículos de primera necesidad, todo ello por un periodo de dos años.

«Todo eso y muchos otros crímenes ha demostrado que los mandatarios de ese régimen artificial tienen un instinto salvaje y asesino que no se diferencia del que tenían en las primeras décadas de la tragedia de Palestina, que siguen la misma política y tienen la misma naturaleza brutal e inmisericorde que provocaron las calamidades de Dir Yasin, Sabra y Shatila», declaró.

Asimismo, su Eminencia dijo que «han pasado ya 60 años de la ocupación de Palestina. Durante todo este tiempo se han puesto al servicio de los usurpadores todos los medios de poder material, desde armas y tecnología, pasando por esfuerzos políticos y diplomáticos y por grandes redes del imperio mediático y de la información»

«A pesar de todos estos diabólicos y sorprendentes esfuerzos, los usurpadores y sus patrocinadores no solo no han podido resolver el tema de la legitimación del régimen sionista sino que además se ha ido enredando este asunto cada vez más.», agregó.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica se refirió además a cómo los medios occidentales y los gobiernos que apoyan el sionismo no pueden tan siquiera tolerar que se cuestione el holocausto - que fue la excusa para usurpar los territorios palestinos - , de cómo desde el oriente de Asia hasta América Latina (120 países) se forman manifestaciones espontáneas y sin precedentes «incluso en Europa y el Reino Unido, que es la cuna originaria de ese árbol del mal», manifestaciones que «defienden la resistencia islámica de Gaza y defendieron la resistencia islámica del Líbano en aquella guerra de 33 días, todo lo cual demuestra que ha surgido una resistencia mundial contra el sionismo que nunca en estos sesenta años ha sido tan seria y considerable.»

Ayatolá Jamenei señaló el hecho de cómo los países de los Balcanes, del Cáucaso y el sur de Asia recuperaron su identidad nacional tras 80 años de ocupación soviética, y se preguntó entonces porqué no el pueblo palestino puede hacer lo propio con su identidad árabe y musulmana. Luego de esto, aludió al «craso error» que por ahí se propone de que la única salvación de los palestinos pasa por la negociación. « ¿Negociación con quien? - Se preguntó el líder en forma de exclamación -. ¿Con un régimen usurpador, prepotente y perdido que no cree en otro principio que no sea en el de la fuerza? ¿Qué consiguen quienes se contentan con ese juego y engaño?»

Por otra parte, su Eminencia se preguntó retóricamente si al decir que se debe negociar se refieren a hacerlo con Estados Unidos y el Reino Unido, que «han sido los que han cometido el mayor pecado al crear y apoyar a ese tumor canceroso» que «además, más que ser mediadores son partes en el litigio» y recordó que «nunca el gobierno estadounidense ha retirado su respaldo incondicional a ese régimen y ni siquiera ha detenido sus crímenes cuando éstos han sido evidentes, como es el caso reciente de Gaza.»

«Ni siquiera el nuevo presidente de Estados Unidos, que ha llegado al poder con la consigna de cambiar las anteriores políticas de Bush, ha dejado de hablar de un apoyo incondicional a la seguridad de Israel, es decir, de defensa al terrorismo de estado, de defensa de la injusticia y la prepotencia y de defensa del asesinato en masa de centenares de mujeres y niños palestinos durante 22 días de guerra. Esto no es más que el mismo camino desviado de la era Bush, nada más ni nada menos», argumentó, al tiempo que tachaba de «acción estéril» el «negociar con los foros adscritos a la ONU» porque «pocos ejemplos tan escandalosos hay en el tema de Palestina como el de la ONU.»