Durante el encuentro, su Eminencia se refirió a la película anti islámica que insulta al santo Profeta del Islam (PB) y señaló que las ceremonias del Hajj de este año tienen una importancia particular.

«La unidad de la comunidad islámica mundial (Ummah) — la cual se centra en la personalidad del último Profeta (PB)— y la expresión de la profunda aversión e ira de los musulmanes hacia el frente de las potencias arrogantes, debe manifestarse durante el Hajj de manera hermosa e impresionante Y este es el verdadero significado de la renuncia y rechazo a los politeístas», agregó.

El Líder Supremo dijo que la agresión y el insulto contra el santo Profeta (PB) por parte de las potencias arrogantes y sus agentes, demuestra que los enemigos y el frente de las potencias arrogantes guardan un profundo rencor en contra del santo Profeta del Islam (PB), y agregó: «La postura que los políticos occidentales han adoptado al respecto, no difiere de sus típicas posturas hostiles.»

«El insulto contra el santo Profeta del Islam (PB) y la postura que los líderes de las potencias arrogantes han adoptado al respecto, han puesto en evidencia el verdadero rostro y el principal núcleo de la confrontación entre los frentes de la verdad y la falsedad. Ha quedado claro que la hostilidad de las potencias arrogantes es debido al Profeta (PB) y la esencia del Islam», reiteró.

El Ayatolá Jamenei se refirió a las protestas generalizadas en los países islámicos y no islámicos en contra de la insultante película, y enfatizó que ello ha demostrado que la comunidad islámica mundial tiene una gran capacidad.

Su Eminencia dijo que el respeto por el Santo Profeta (PB) es lo que los seguidores de las diferentes escuelas doctrinales islámicas tienen en común, y agregó: «Cuando se trata del Santo Profeta (PB), las diferencias entre musulmanes chiitas y sunitas o entre Islam ''moderado'' y ''radical'' se vuelven totalmente insignificantes. Todo el mundo ha intervenido, proclamándose y protestando en cuerpo y alma, porque el Profeta (PB) es el núcleo de las creencias divinas e islámicas».

El Líder Supremo de la Revolución Islámica enfatizó que es necesario preservar la unidad islámica, la cual se centra en la personalidad del santo Profeta del Islam (PB) y expresar aversión hacia sus enemigos, y agregó: «Renunciar y rechazar a los politeístas significa que los musulmanes deben sentir que se enfrentan a un mismo enemigo y deben renunciar y rechazar a este enemigo desde lo más profundo de sus corazones.»

El Ayatolá Jamenei se refirió a la alta jerarquía espiritual del santo Profeta (PB), y agregó: «Los musulmanes deben apoyar todo aquello que el santo Profeta (PB) promovió, es decir, el monoteísmo, el Islam y el Sagrado Corán; y deben convertir su peregrinación a La Meca (Hajj) en una manifestación pública de amor y respeto por él.»

Su Eminencia exhortó a la comunidad islámica mundial a no bajar la guardia contra las peligrosas conspiraciones e intrigas de los enemigos, que tienen como objetivo fomentar la discordia entre los musulmanes, principalmente entre aquellos que se manifiestan y protestan.

«Los enemigos de la religión y las potencias arrogantes deben saber que a pesar de ciertas diferencias doctrinales e ideológicas que existen entre los musulmanes, la comunidad islámica está unida contra ellos», reiteró.

Asimismo, el Líder Supremo de la Revolución Islámica enfatizó: «No debemos permitir que el frente de las potencias arrogantes recurra a la vieja táctica de fomentar la discordia entre los musulmanes, para salvarse de la ira de la nación islámica».

En otra parte de sus declaraciones, el Ayatolá Jamenei dijo que el Hajj es un acto obligatorio que está imbuido con el recuerdo de Dios, y agregó: «El Hajj es una de las mejores oportunidades para recordar a Dios y dedicarse —solemnemente— a la oración.»

Su Eminencia exhortó a los peregrinos a fortalecer sus relaciones con los musulmanes de otros países, haciendo hincapié en lo que tienen en común y observando el código de ética y moral islámica.