Durante, el encuentro su Eminencia expresó sus parabienes, diciendo: «Me gustaría felicitar a toda la querida audiencia, los queridos hermanos y hermanas, al querido pueblo iraní, a todos los musulmanes chiitas y a todos aquellos que se sienten orgullosos y disfrutan de las verdades del Islam y el conocimiento de esta religión divina, en ocasión del fausto día de la fiesta de Ghadir.

Y doy la bienvenida a todos los presentes, en particular a los queridos hermanos y hermanas que han venido de ciudades lejanas y que han adornado este encuentro con su presencia.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que el tema de Ghadir es sumamente importante en la historia del Islam, y agregó: «En primer lugar, la esencia de este asombroso e importante evento y esta única declaración - ''De quien yo sea su Maula (guía, maestro, protector), Ali es también su Maula" - no es algo que ha sido narrado solamente por las tradiciones chiitas.»

El Ayatolá Jamenei dijo que este evento está entre las verdades claras y absolutas, es un acontecimiento registrado por las distintas escuelas de pensamiento islámico.

Su Eminencia señaló que aquellos que pretendieron encontrarle imperfecciones a esta cuestión no dudaron del origen ni veracidad de esta declaración, por el contrario, recurrieron al ta'wil e interpretación de esta frase.

«El tema de Ghadir es un asunto histórico e islámico claro, y las dudas e interrogantes -sobre el significado de esta frase- que se han suscitado hoy en día en las mentes de algunos intelectuales y filósofos recién llegados, son las mismas dudas y preguntas que se han venido planteando desde hace mil años. Y estas preguntas ya han sido respondidas por los grandes ulemas. Por lo tanto, no tiene cabida esta clase de dudas sobre la esencia de este asunto, sobre este evento ni sobre lo que el Santo Profeta (PB), dijo», agregó.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica explicando el contenido de esta frase histórica, sagrada y significativa, dijo: «Aparte de la designación del Príncipe de los Creyentes (P) como el Imam de los musulmanes y legatario del Santo Profeta (PB) -que es el sentido común de esta frase- hay otro tema importante que no debe ser ignorado, el cual es la atención del Islam a la cuestión del gobierno y la política y lo significativo de este tema desde el punto de vista islámico».

El Ayatolá Jamenei enfatizó que la respuesta clara y lógica a esas personas que han tratado de excluir el Islam de los escenarios sociales y políticos, para confinarlo a los asuntos personales e individuales y adoptar una perspectiva secular hacia el Islam -que las manos de los enemigos y sus actividades propagandísticas han estado promoviendo entre los musulmanes durante muchos años- es el tema de Ghadir.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que el Profeta Muhammad (PB), obedeciendo la orden de Dios, Exaltado sea, enfatizó una cuestión importante y fundamental, la cual era el gobierno después de él (PB).

El Ayatolá Jamenei señaló que en este caso, el nombramiento del Príncipe de los Creyentes -el Imam Ali (P) - no se limitó a los aspectos espirituales, y agregó: «Los aspectos espirituales no son cosas que alguien pueda instalar o designar»

Su Eminencia explicó que las cuestiones para las que alguien puede ser nombrado son el gobierno, la política y la administración del país y la sociedad islámica, y reiteró: «El Santo Profeta (PB) recomendó esto a la gente, y este es un punto importante en el tema de Ghadir y una respuesta a todas esas personas que piensan y promueven la idea de que el Islam debe mantenerse alejado de las cuestiones políticas y de los asuntos relacionados con el gobierno.»

El Líder Supremo de la Revolución, enfatizó que en el evento de Ghadir hay dos verdades -es decir, la verdad sobre el nombramiento del Príncipe de los Creyentes (P) como el Imam después del Santo Profeta (PB) y la verdad acerca de la atención a la cuestión del gobierno, política, Imamato y la administración de la comunidad islámica (Ummah) después del Santo Profeta (PB), y agregó: «Estas dos verdades se encuentran entre las enseñanzas que han sido garantizadas por Ghadir y son una gran lección para todos los musulmanes, ya sea para el presente o el futuro».

El Ayatolá Jamenei enfatizó que en la actualidad, a lo que se le debe prestar atención es el hecho de que el tema de Ghadir es una cuestión doctrinal, y agregó: «El pensamiento doctrinal chiita y los seguidores de la familia del Profeta Muhammad (PB) y la escuela de Imamato están comprometidos con el tema de Ghadir.»

Su Eminencia dijo que esta es la base del pensamiento chiita y no hay lugar para debates sobre esta cuestión, y reiteró: «Aquellos que dudan de esto y aquellos que tienen interrogantes en este sentido, pueden participar en reuniones académicas y especializadas, a fin de discutirlo.»

El Líder Supremo dijo que esto no debe influir en la vida pública de los musulmanes, su cooperación y hermandad hacia los otros, y agregó: «La cuestión de las diferencias entre las escuelas de pensamiento islámicas -especialmente entre chiitas y sunitas- ha sido uno de los objetivos de la codicia de los enemigos del Islam, no solo de los enemigos del Islam chiita.»

El Ayatolá Jamenei explicó que durante muchos años, los enemigos del Islam han utilizado toda clase de recursos para crear discordia entre los musulmanes, debido a que la existencia de discordia entre ellos les hará gastar esfuerzos, energía y motivación en luchas internas.

«Por un lado, esto debilita a los musulmanes y por otro los hace descuidarse de los asuntos exteriores y no ponerle atención a los grandes enemigos», reiteró.

Su Eminencia dijo que esta ha sido la principal política de la arrogancia mundial desde hace muchos años, y explicó: «Después de la victoria de la Revolución Islámica y el establecimiento del sistema islámico, debido a que fueron testigos del desarrollo de los pensamientos de la República Islámica en el Mundo del Islam, pusieron mayor énfasis y mostraron más empeño en crear discordia, habiendo invertido toda clase de esfuerzos para separar al Mundo Islámico de la República Islámica.»

El Líder Supremo continuó explicando que desde hace muchos años, hasta el día de hoy, los enemigos del Islam han estado alimentando el fuego de la discordia entre chiitas y sunitas para desviar la atención de ambas escuelas de pensamiento islámico, del enemigo principal -que es el enemigo del Islam, no el enemigo de los chiitas o los sunitas en particular- y para que puedan mantenerse ocupados unos con otros.

«Esta es la política de la arrogancia y el colonialismo. Y los expertos en esta política son las manos políticas y de seguridad del perverso gobierno Inglés que ha estado activo en este campo desde hace mucho tiempo, siendo ya todo un veterano», enfatizó.

El Ayatolá Jamenei señaló que la corriente takfiri -que ha surgido en Irak, Siria y otros países de la región y que en la actualidad se enfrenta a todos los musulmanes, no solo a los chiitas- es una creación de los arrogantes y colonialistas, y agregó: «Han sido ellos mismos, quienes han creado a al-Qaeda y Daesh con el fin de hacerle frente a la República Islámica y al movimiento del Despertar Islámico. Sin embargo, este producto se ha convertido en una carga para ellos mismos.»

«Por supuesto, si analizamos cuidadosamente la situación, veremos que el esfuerzo irreal que Estados Unidos y sus aliados están haciendo en la región hoy en día bajo el nombre de guerra contra el Daesh es, de hecho, un esfuerzo por canalizar la discordia entre los musulmanes más que un esfuerzo por erradicar esta maligna corriente terrorista», señaló su Eminencia.

El Líder Supremo afirmó que musulmanes chiitas y sunitas o cualquier persona que esté comprometida con el Islam y crea en el Sagrado Corán - deben saber que las políticas de Estados Unidos y los sionistas son enemigas del Islam, la conciencia islámica y el gobierno islámico.

«El esfuerzo que están haciendo hoy es la continuación del esfuerzo que han estado haciendo durante 35 años. Tienen 35 años de estar haciendo todo tipo de esfuerzos. Sin embargo, con el permiso y la gracia de Dios, fueron derrotados en todas las conspiraciones y planes que una y otra vez perpetraron contra la República Islámica. Y gracias al favor divino, serán derrotados nuevamente», enfatizó.

Al final de su discurso, el Ayatolá Jamenei enfatizó que los musulmanes -tanto chiitas como sunitas- tienen la responsabilidad de no ayudar al enemigo insultándose mutuamente, y agregó: «Los seguidores de ambas escuelas de pensamiento islámico no deben provocarse entre sí; tienen que respetar las santidades y creencias de los otros. De lo contario, el único que saldrá beneficiado es el principal enemigo en común».