El Líder Supremo haciendo hincapié en el importante papel desempeñado por la Policía en el establecimiento de la seguridad, dijo: «la capacidad y la preparación de la fuerza policial, así como la determinación y la fe religiosa de su personal deben incrementarse día a día».

El Ayatolá Jamenei definió la seguridad como «la tranquilidad psicológica individual y calma general en la sociedad», y agregó: «cuando no hay seguridad, incluso a pesar de la existencia de capacidad y estímulos [suficientes] entre los individuos de una sociedad, se pierde la motivación para la realización de diversas actividades económicas, culturales, políticas y de servicios».

Tras citar una aleya del Corán, Su Eminencia describió la seguridad como una fuente que propicia el aumento y fortificación de la fe de los creyentes, y agregó: «la Policía es uno de los pilares más importantes de la seguridad del país. Por supuesto, este inmenso pilar de la seguridad está compuesto por una mano de obra mayoritariamente eficiente, honorable y perseverante».

«La determinación, fe, motivación y moral de estas fuerzas debe ser potenciada y fortalecida, incesantemente», manifestó el Líder Supremo.
En referencia a los grandes servicios prestados por la Policía en todo el país, el Ayatolá Jamenei subrayó el importante papel desempeñado por las estaciones de policía debido a su encuentro directo con la gente.

Su Eminencia, quien también es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán, se refirió a los rápidos cambios que varios sectores han experimentado, en particular los avances en la ciencia y la tecnología, recordándoles a los funcionarios y comandantes de la Policía iraní, la necesidad de «reforzar su preparación y actualizar sus habilidades, reconocer plenamente y cumplir con sus deberes; y explicar sus actividades y servicios a la gente a través de los medios de comunicación y de una manera precisa».

«Estos son principales requisitos para el establecimiento y la promoción de la seguridad en el país», agregó el Ayatolá Jamenei.

Previo a la audiencia, los funcionarios realizaron las oraciones del mediodía y de la tarde bajo la guía del Líder Supremo de la Revolución Islámica.