El Ayatolá Jamenei, en un discurso pronunciado ante miles de personas de la provincia de Azerbaiyán Oriental, en la víspera del aniversario del histórico levantamiento del pueblo de Tabriz contra el régimen del Shah, consideró a este levantamiento inteligente y heroico como un punto en el movimiento islámico del pueblo de Irán y un obvio ejemplo de la vigilancia, discernimiento y la voluntad de la gente de esta ciudad.
El Ayatolá Jamenei agregó: «Estas características son los secretos para salvar a las naciones de la opresión y tiranía. Así, situándose en el camino del desarrollo y felicidad, gracias a la bendición del liderazgo de Imam Jomeini (Que la misericordia de Dios sea con él) la nación de Irán también se transformó de una nación oprimida por los poderes coloniales y los gobernantes dictadores relacionados con los enemigos en una nación viva, despierta y fuerte, mostrando su poder nacional.»
Ayatolá Jamenei enfatizó que «la principal diferencia de la Revolución Islámica con las otras revoluciones es la fe la de la gente y su confianza en las consignas e ideales de la revolución». Refiriéndose a la manifestación del 22 de Bahman de este año, dijo que «aunque han pasado ya 29 años de la victoria de la Revolución Islámica, la presencia, alegría y entusiasmo de la gente fue mucho mayor que en los años anteriores debido a que la Revolución Islámica y la nación de Irán están vivas.»
Asimismo, su eminencia aseveró que «las personas que de una forma compulsiva dijeron en los años anteriores que ‘la Revolución islámica y el Imam Jomeini habían sido olvidados entre el pueblo y especialmente entre los jóvenes', se equivocaron porque la Revolución Islámica y sus consignas hoy más que antes están vivos entre el pueblo, y la gente hoy en día le tiene incluso más amor a los personajes y consignas de la Revolución Islámica»
Ayatolá Jamenei, consideró que la posición y la situación actual de la nación Iraní en el mundo y la confianza de sus jóvenes en sí mismos es el resultado de la Revolución Islámica y agregó: «La razón principal de todas estas presiones políticas y económicas e incluso militares es la preocupación de los enemigos por la voluntad de este pueblo de continuar su acelerada marcha en la senda de sus ideales y sobre los valores de su revolución, confiando en sí mismos, y porque al haber quedado claro la eficacia de esta revolución peligrará la existencia del imperialismo en los países musulmanes»
El Ayatolá Jamenei refiriéndose al discurso del presidente de Estados Unidos, sobre la necesidad de continuar presionando a Irán para que abandone su programa de energía nuclear, dijo: «Ellos saben que Irán no está tratando de fabricar armas nucleares, pero se esfuerzan en hacer estas alegaciones en un intento de evitar que la nación de Irán acceda a la ciencia de más alto nivel, apoyándose en sus capacidades y talentos nacionales; porque llegar a estos poderes sin ayuda ajena revive el espíritu de autoestima de las naciones musulmanas.»
Asimismo, describió la resistencia con tenacidad ante Estados Unidos y los arrogantes del mundo, como el único camino hacia el desarrollo, progreso y para el hacer valer los derechos. Y señaló que la nación de Irán anuncia claramente que pese a todas las propagandas y presiones, defenderá y tomará su derecho. «Dios, se lo reprochará a nuestra nación sino lo hacemos»
El Líder de la Revolución Islámica dijo que el camino de Imam Jomeini (Que la misericordia de Dios esté con él) y sus consignas, los valores de la Revolución Islámica y la resistencia de la nación de Irán son la riqueza y orgullo de muchos musulmanes. Refiriéndose a las características del mártir Mughniyah agregó: «El mártir Hajj Imad Mughniyah que ha sido martirizado por manos sionistas decía que se consideraba un hijo de Imam Jomeini, y estaba orgulloso de ello, ya que el Imam le dio vida a él y a otros jóvenes de Líbano y Palestina, infundiéndoles un nuevo espíritu»
La vergonzosa derrota del régimen sionista y de Estados Unidos en la guerra de 33 días del Líbano ante un grupo de jóvenes creyentes con armas ordinarias, es un ejemplo de la influencia de la Revolución Islámica y del movimiento del Imam. Asimismo, enfatizó que los jóvenes libaneses encomendándose a Dios y no teniendo miedo a la muerte, con resistencia en el campo de batalla y confianza en sí mismos acabaron con el mito de invencibilidad de los regimenes sionista y norteamericano».