El representante del Líder de la Revolución Islámica y encargado de los peregrinos iraníes a la Sagrada Casa de Dios leerá y publicará el sábado, en la ceremonia del rechazo a los asociadores en la llanura de Arafat, un importante mensaje del ayatolá Jameneí a los peregrinos.
El mensaje del Líder de la Revolución Islámica para los peregrinos de la Casa de Dios:
El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha emitido este sábado un mensaje con motivo de la peregrinación anual del Hach.
El Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán emitió un mensaje este sábado, en el que condena el acto criminal de los terroristas takfiríes en Irak, considerándolo un «acto de venganza cobarde» por el gran revés que han sufrido en el territorio árabe durante los actos conmemorativos de Arbaín, que se celebraron con plena seguridad.
El Ayatolá Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica emitió un mensaje en ocasión de la Peregrinación Mayor a La Meca (Hach) - 2016, donde ha recordado la tragedia de Mina y criticado la actuación de Arabia Saudí.
El siguiente es el texto completo del mensaje emitido el día de hoy (20 de marzo de 2016), por el Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica, con motivo del Nouruz.
El noble Ayatolá Jameneí, Líder Supremo de la Revolución Islámica emitió un mensaje de condolencias en ocasión del fallecimiento del artista excepcional y comprometido Farajullah Salahshur.
El Ayatolá Sayyid Ali Jamenei, Líder de la Revolución Islámica, ha emitido un comunicado declarando tres días de luto nacional, tras el trágico accidente del jueves en Mina, donde un gran número de peregrinos del Hach perdieron la vida.
El Sayyid Ali Jameneí, líder Supremo de la Revolución Islámica, dirigió un mensaje a los peregrinos del Hach de este año. El siguiente es el texto completo de este mensaje emitido el 19 de septiembre de 2015.
El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jameneí, emite un mensaje por el motivo de la gran congregación de los peregrinos a la Meca.
El más alto nivel de religiosidad de un musulmán consiste en ser humilde y someterse a Dios Misericordioso, asumir el compromiso de cargar las obligaciones que descansan sus hombros; el ser entusiastas, dinámicos y tomar decisiones en el ámbito religioso y otros campos; ser amables y saber perdonar el proceder de los hermanos, y a la hora de enfrentarse a acontecimientos difíciles tener coraje, confianza en sí mismo y esperanza, contribuir a la causa de Dios en todo lugar y momento y en todos los asuntos.
La alabanza es para Dios, Señor de los mundos, y la paz y las bendiciones sean sobre el grandioso y fidedigno Profeta, y sobre su casa inmaculada y distinguida familia y sus benditos compañeros.
El momento del Hach es la primavera de la espiritualidad y el brillo del monoteísmo en los horizontes del Universo; y los rituales del Hach son una fuente cristalina que puede purificar al peregrino de todas las manchas del pecado y negligencia y devolverle a su corazón la luz de su esencia divina.
«Ciertamente, se cumplirá la promesa divina y la Ummah (nación islámica), a través de la fe, sinceridad, esperanza, esfuerzo, paciencia y discernimiento dejará atrás los caminos traicioneros que tiene ante sí», dijo el Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán en su mensaje a los peregrinos de La Meca.
Alabado sea Dios, el Señor de todo el mundo y la paz sea para nuestro Profeta Mohammad, su familia pura y sus compañeros.
Saludos a los peregrinos de la Casa de Dios, a los huéspedes de la residencia del Todopoderoso y a los que han respondido a su llamada divina.... Y bendigo a corazones purificados por el recuerdo de Dios y abiertos a sus incansables bendiciones y bondades.
Alabado sea Dios, el Señor del Universo, y las Bendiciones sean sobre el señor de los Mensajeros, sobre su purificada Familia y sobre sus veraces Compañeros.
Los días de la Peregrinación (Hayy) son días de esperanza y albricias. Por un lado el esplendor de la unión entre los viajeros a la Casa de la Unicidad crea esperanza en los corazones, y por otro, la renovación de las almas por la bendición del recuerdo de la Casa de la Unicidad, albrician la apertura de las puertas de la Misericordia.
Que la bendición y la paz sean con nuestro señor Muhammad y su familia purificada. Dice el Sapientísimo en el Corán: «Por cierto que esta vuestra comunidad es una sola y Yo soy vuestro Señor, ¡adoradme pues!»