En este encuentro, su Eminencia se refirió a los grandes progresos que la nación iraní ha alcanzado durante los últimos treinta años, y dijo que el mismo es el resultado de la fe, la preservación de la auto-confianza nacional, y el movimiento científico, así como los esfuerzos prácticos por parte de la nación iraní.

Ayatolá Jamenei agregó: "La fuerte y entusiasta presencia de la nación iraní en las manifestaciones que marcan la victoria de la Revolución Islámica es una representación simbólica de la resistencia de la nación iraní y su determinación para alcanzar las metas de la Revolución Islámica. Y este año las manifestaciones - gracias al favor de Dios - se han convertido en otra escena de la gran presencia nacional."

En este encuentro que se celebró con ocasión de la histórica reunión del personal de la Fuerza Aérea con el Imam Jomeini (ra), el 8 de febrero de 1979, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas Iraníes describió la reunión como un acontecimiento histórico que se basa en la sinceridad, la firme determinación, y una verdadera comprensión de los acontecimientos de la época.

Asimismo, agregó: "El personal de la Fuerza Aérea del Ejército Iraní demostró su lealtad a la nación el 8 de febrero de 1979 y dicho evento representa la verdadera naturaleza de la Fuerza Aérea del Ejército Iraní."

Ayatolá Jamenei dijo que es vital lograr una verdadera comprensión de los acontecimientos regionales y reiteró que la Revolución Islámica ha traído grandes cambios.

Su Eminencia se refirió además a las transformaciones causadas en la sociedad iraní, la comunidad islámica, y en el orden político del mundo como tres de los mayores cambios que tienen su origen en la victoria de la Revolución Islámica, y agregó: «La Revolución Islámica convirtió a la nación de Irán en una nación libre , decidida, honorable e influyente .»

Ayatolá Jamenei se refirió asimismo al papel decisivo de la República Islámica en la región y dijo que este es un hecho que también es reconocido por los enemigos de la República Islámica.

Por otra parte, su Eminencia dijo que la situación actual de la República Islámica no se puede comparar a la de la época anterior a la Revolución.

Su Eminencia añadió: "Algunas de las superpotencias todavía no aceptan estos grandes cambios. Sin embargo, ninguno de los poderes del mundo puede dominar o levantarse en contra de una nación que se da cuenta de la importancia de la determinación y que actúa de manera decidida."

En otra parte de su discurso, Ayatolá Jamenei describió los futuros desafíos de la República Islámica en su lucha contra las superpotencias del mundo y dijo: "Durante los últimos treinta años, las superpotencias del mundo han concebido diversos complots con el fin de restablecer su cruel dominio sobre la nación de Irán, pero la nación ha frustrado sus planes, mostrando una gran resistencia y determinación. Y la nación iraní nunca se rendirá ante el dominio de las superpotencias del mundo."

"En medio de todas las sanciones que le fueron impuestas a la nación iraní a través de los años, el primer satélite iraní fue lanzado al espacio. Y la nación iraní logró desarrollar la tecnología - al alcance de unos pocos países poderosos - para enriquecer uranio, a pesar de todas las dificultades que le fueron impuestas por los enemigos", reiteró su Eminencia.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica también dijo que esas sanciones y las amenazas ya no sirven de nada, porque la nación iraní ha encontrado el camino recto y seguirá el camino del progreso sobre la base de su sólida determinación y su profunda fe.

En otra parte de su discurso, el Líder Supremo de la Revolución Islámica rindió homenaje al Imam Jomeini (ra) y a los mártires de la Fuerza Aérea del Ejército Iraní, así como a los mártires de otras unidades de las Fuerzas Armadas.

Luego, su Eminencia se refirió a la Fuerza Aérea como una unidad determinada e innovadora que ha hecho grandes progresos y reiteró que la Fuerza Aérea siempre ha sido una de las más importantes unidades del Ejército de la República Islámica en diferentes circunstancias, particularmente durante la época de la Defensa Sagrada.