Su Eminencia se refirió a la ruta de navegación entre Irán y Omán como una de las rutas más sensibles en el mundo, y añadió que la seguridad en el Golfo Pérsico conlleva diversas cuestiones.

El Líder Supremo dijo que Estados Unidos y algunos otros estados intervencionistas siempre han obstaculizado la tranquilidad en el Golfo Pérsico, creando inseguridad y desconfianza en la zona.

Ayatolá Jamenei exhortó a los países del Golfo Pérsico a que hoy más que nunca cooperen entre sí para garantizar la seguridad en la zona.

En esta reunión que también contó con la presencia del Presidente Mahmud Ahmadineyad, el Sultán Qabus expresó su profunda complacencia por su visita a Irán y por haberse reunido con su Eminencia, el Líder Supremo de la Revolución Islámica, añadiendo que los motivos para la expansión de las relaciones entre los dos países son abundantes. Asimismo manifestó que sus conversaciones en Teherán se han centrado sobre la expansión de los vínculos en el área económica.

El Rey reafirmó las observaciones de Ayatolá Jamenei sobre la importancia de la seguridad en la zona e instó a los países de la región a proporcionar medios que garanticen la seguridad y estabilidad, teniendo en cuenta los intereses regionales comunes en el área de la ampliación de la cooperación en este sentido.