Durante una reunión con estudiantes y profesores Basiy, el Ayatolá Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica, dijo esta mañana que en las actuales circunstancias, la unidad y la solidaridad deben ser preservadas en la sociedad y se debe evitar todo tipo de discordias.
«El arte de la Revolución Islámica fue el arreglárselas para eliminar todas las falsas paredes entre la gente y convertir a todo el país en un campo vasto y unificado para la nación iraní. Pero hay algunas personas que quieren reconstruir esas mismas paredes inapropiadas e injustas», agregó.
Su Eminencia reiteró: «Los principios y la dirección están claros, y todo aquel que avanza en esta dirección y en el marco de estos principios es un miembro de la República Islámica.»
Líder Supremo de la Revolución Islámica señaló que de acuerdo con el noble Profeta (PB) nadie debe pisotear los derechos de otras personas, incluyendo a aquellos que han pecado o cometido un error, y agregó: «Uno debe ser justo y no decir nada más allá de lo que es verdadero y apropiado.»
Asimismo, el Ayatolá Jamenei manifestó: «Es erróneo pensar que sólo porque algunas personas son muyahid y revolucionarias, pueden decir lo que quieran acerca de las personas que creen que son menos muyahid o revolucionarias que ellas.»
Su Eminencia subrayó que es natural que la gente sea diferente en función del grado de su fe y sus tendencias. «En cuanto a la vida social se refiere, la unidad y la solidaridad deben ser preservadas dentro de los límites de la justicia a pesar de estas diferencias», agregó.
El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que el punto importante es que no debemos perder de vista los objetivos principales y los criterios. «La lucha contra las potencias arrogantes, determina la resistencia frente a la incredulidad y la hipocresía en todo el mundo, y la especificación clara de los límites con los enemigos de la religión y la Revolución son los principales criterios », afirmó.
Además, Ayatolá Jamenei dijo: «Aquellos que no especifican claramente los límites entre ellos y los enemigos de la religión y la Revolución sólo perderán respeto. Y si algunos desarrollan una inclinación hacia los enemigos, estarán fuera del marco de la República Islámica».
«Estos criterios son los principios fundamentales del movimiento progresista de la Revolución Islámica. Y este movimiento debe continuar manteniendo estos criterios», reiteró su Eminencia.
El Líder Supremo de la Revolución Islámica se refirió a la situación actual del mundo y los esfuerzos de las potencias arrogantes contra la República Islámica, y agregó: «La situación actual es delicada porque los centros de la arrogancia mundial han perdido su control sobre los asuntos mundiales en sus esfuerzos contra el movimiento islámico, que está personificado por la República Islámica de Irán. Y están haciendo - desesperadamente - sus esfuerzos por última vez.»
Ayatolá Jamenei dijo que las potencias arrogantes han llegado a un callejón sin salida, y reiteró: «Muchas de sus viejas técnicas propagandísticas han sido reveladas a la gente de todo el mundo».
Su Eminencia se refirió al odio hacia los Estados Unidos y el régimen sionista, el cual es cada vez mayor en todo el mundo, y subrayó: «Hoy en día incluso en Estados Unidos la gente está poniéndose muy furiosa por la presencia de grupos de presión sionistas. A pesar de las estrictas restricciones impuestas por el régimen estadounidense, los signos de esta furia son evidentes. »
El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que el surgimiento de la Revolución Islámica en Irán fue la principal causa de los problemas actuales del orden imperialista, y agregó: «Su enemistad hacia la República Islámica se debe a esta razón, pero las decisiones confusas para emitir resoluciones, la exageración artificial de las sanciones y las amenazas militares a medias, son signos de la desesperación de las potencias arrogantes contra el gran movimiento digno del Mundo Islámico».
Ayatolá Jamenei dijo que tolerar las dificultades preparará el terreno para alcanzar logros aún mayores, y declaró: «Hacer esfuerzos científicos, participar en actividades de investigación y religiosas, fomentar el espíritu de la yihad en todas las actividades científicas, estar presente cada vez que se necesite, y promover la perspicacia en los centros académicos - estas son lo que las universidades necesitan hoy en día. »
Su Eminencia dijo que la formación - hace 12 años - de la Organización Académica Basiy fue un gran logro para la República Islámica, y declaró: «Por supuesto, esto no significa que los creyentes y los profesores revolucionarios se limiten a este grupo. Por el contrario, en la actualidad hay un gran número de profesores en las universidades Basiy que están jugando un papel importante y destacado en las universidades de todo el país.»
Ayatolá Jamenei dijo que la formación de los Basiy fue un movimiento único en la República Islámica, y añadió que los Basiy son un legado del gran Imam (ra). Además, declaró: «La formación de los Basiy tuvo lugar al comienzo de la Revolución cuando el Imam Jomeini (ra) confió en el pueblo y le pidió estar presente en el escenario. Y tal confianza ayudó a desarrollar la confianza de nuestro pueblo en sí mismo.»
El Líder Supremo de la Revolución Islámica señaló que la cultura y la esencia de los Basiy ha dado lugar a grandes logros de la República Islámica.
El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que las actividades de los Basiy van más allá de los propósitos militares, y añadió que los Basiy no deben considerarse como una unidad militar. «Los Basiy son un organización pública y los miembros del Basiy están presentes en todas las etapas y en todos los tiempos», agregó.
Ayatolá Jamenei se refirió a la posición de los académicos, sobre todo a los académicos creyentes y revolucionarios en las universidades y dijo que tener una presencia oportuna, influyente y comprometida en las universidades y en la educación de los estudiantes creyentes son los deberes de los profesores Basiy.
Su Eminencia dijo que los centros académicos esperan continuar el movimiento científico del país y ayudar a la nación iraní a lograr la posición científica que se merece.