Durante la reunión - que duró más de cuatro horas - los participantes discutieron los principios, características y diferentes aspectos del modelo islámico-iraní de progreso.

Su Eminencia enfatizó  que todas las capacidades de las personalidades destacadas del país deben ser utilizadas en el desarrollo de este modelo estratégico.

Asimismo, se refirió al pensamiento, el conocimiento y la espiritualidad como áreas importantes en el modelo de progreso islámico-iraní, y reiteró: «Este modelo será un documento fuente para todos los documentos estratégicos del país.»

El Líder Supremo insistió en que se le debería dar continuidad a estas reuniones y manifestó que la participación de los intelectuales en las cuestiones fundamentales e importantes del país es uno de los principales objetivos de dichas reuniones.

«Hay grandes metas y tareas que se necesitan cumplir en el país. Las grandes capacidades de las personalidades del país se deben utilizar con el fin de lograr estos objetivos y la participación de los intelectuales en estas cuestiones importantes es uno de los requisitos para cumplir este objetivo», agregó.

El Ayatolá Jamenei dijo que la promoción de una cultura y un discurso acerca de las cuestiones más importantes del país en la sociedad y entre las personalidades destacadas del país es otro de los objetivos de la celebración de estas reuniones estratégicas.

«Definir el camino y la dirección del movimiento del país en el futuro es otro propósito de la celebración de dichas reuniones», agregó.

Su Eminencia dijo que exponer la situación que se desea y definir las formas de llegar a esa situación es una de las razones por las cuales es necesario desarrollar un modelo de progreso  islámico-iraní.

«El uso de los dos términos ‘iraní’ e ‘islámico’ no significa en absoluto que no debe hacer uso de las experiencias y los logros de otras naciones», agregó.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica además se refirió a los diferentes aspectos del modelo de progreso islámico-iraní.

El Ayatolá Jamenei,  además, refiriéndose a las áreas del pensamiento, el conocimiento y la espiritualidad, dijo: «El modelo de progreso islámico-iraní se debe formular de manera que conduzca a la sociedad hacia el pensamiento y convierta el pensamiento y la producción de ideas en una realidad importante de la sociedad.»

Por otra parte, su Eminencia señaló que delinear las estrategias y condiciones para el avance en el área del pensamiento y prestar atención a sus herramientas - incluyendo la educación y los medios de comunicación - son factores importantes que deben considerarse al desarrollar el modelo de progreso islámico-iraní.

El Líder Supremo señaló que la innovación y el propio movimiento que se está llevando a cabo en el ámbito de la independencia científica debe ser acelerado y dijo que los medios para lograr el progreso científico fundamental y global deben ser especificados en el modelo de progreso islámico-iraní.

El Ayatolá Jamenei señaló además que es necesario prestar atención a cuestiones como la justicia, el bienestar, la libertad, el gobierno, la independencia y la grandeza nacional en el modelo de progreso islámico-iraní.

Su Eminencia refiriéndose a la espiritualidad como un área importante en el desarrollo del modelo de progreso islámico-iraní, dijo que la espiritualidad constituye el espíritu del verdadero progreso en todos los ámbitos y cuestiones.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica señaló que prestar atención a la cuestión del monoteísmo es de gran importancia en este modelo y manifestó que todos los problemas de las comunidades humanas se resolverán y el camino del verdadero progreso se abrirá si el monoteísmo y la fe en Dios se promueven en la vida humana.

El Ayatolá Jamenei se refirió al tema del gobierno desde una perspectiva islámica como otra cuestión a la que se le debe prestarse la debida atención y adjuntarse al modelo de progreso islámico-iraní.

«Desde una perspectiva islámica, todas las personas que tienen intención de asumir responsabilidades y la administración deben desarrollar las condiciones requeridas en sí mismos, de lo contrario, les será ilegítimo e ilícito el asumir responsabilidades», agregó

Su Eminencia dijo que la perspectiva islámica rechaza los motivos imperiosos en un gobierno, por lo que,  desde un punto de vista islámico las personas que persiguen el poder y poseen motivos imperiosos no tienen el derecho de asumir el poder. «Y la gente tampoco tiene derecho de elegir a esas personas.

Esta perspectiva que es una fuente de prosperidad debe ser adoptada en el modelo de progreso islámico-iraní», agregó.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica manifestó que es necesario prestarle atención a la cuestión económica en el modelo de progreso islámico-iraní y que la justicia debe ser considerada como una de las bases principales de este modelo. «Esto se debe a que la justicia en el Islam es el criterio para diferenciar entre el bien y el mal y el criterio para juzgar la legitimidad de un gobierno», reiteró.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica se refirió a una visión no materialista de la economía como otro factor importante en el desarrollo del modelo de progreso islámico-iraní y agregó: «El Islam concede la debida importancia a la riqueza y considera la creación de riqueza como una acción apropiada, con la condición de que no se utilice para promover la corrupción, la dominación y la extravagancia.»

Al final de su discurso, el Ayatolá Jamenei reiteró que las reuniones estratégicas deben continuar realizándose, y agregó que todas las capacidades de las personalidades del país se deben utilizar en el desarrollo del modelo de progreso islámico-iraní.

Además, declaró que es necesario establecer un centro especial para perseguir este objetivo estratégico, ya que no es posible - debido a la naturaleza del plan - elaborar este plan en la administración ni en el parlamento.

«Esta gran tarea y movimiento no puede limitarse a un grupo en particular y requiere de la cooperación de todos los intelectuales del país», reiteró su Eminencia, el Ayatolá Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán.