Durante el encuentro, su Eminencia dijo que Irán y Turquía son dos países musulmanes y hermanos, y agregó que las actuales relaciones entre las dos naciones son excepcionales en comparación con años anteriores.

El Líder Supremo se refirió al propósito de las autoridades de ambos países en triplicar el volumen de intercambios comerciales bilaterales y reiteró que Irán considera que los países que tienen fronteras comunes, pueden combinar sus esfuerzos económicos y políticos como una sola unidad con el fin de multiplicar su impacto.

El Ayatolá Jamenei dijo que la actual posición de Turquía en el Mundo Islámico es tan distinta a la que tuviese en el pasado, y agregó que la independencia del país con respecto a Occidente, así como su distanciamiento del régimen sionista - en solidaridad con la nación palestina - son factores clave para el acercamiento del país a la comunidad islámica mundial (ummah).

Su Eminencia elogió la política turca, refiriéndose a ella como «una política correcta», y agregó que cuanto más se acerca Turquía al gran Mundo Islámico, está trabajando tanto en su propio beneficio como en beneficio de todo el Mundo Islámico.

El Líder Supremo se refirió a los puntos de vista comunes de Turquía e Irán sobre cuestiones regionales, especialmente con respecto a Afganistán, Irak, Líbano y Palestina y dijo que los acontecimientos acaecidos últimamente en Egipto son de mucha trascendencia y que podrían ser un terreno para trabajar por el bien del pueblo egipcio y de la región.

El Ayatolá Jamenei, señaló que el dominio de Egipto  por parte de Estados Unidos y el régimen sionista, ha sido un dominio humillante que ha durado décadas, y que al final ha sido el factor clave que ha provocado el levantamiento popular en el país. Asimismo, enfatizó que los egipcios son musulmanes y han contado con fuertes motivaciones.

Su Eminencia dijo que dondequiera que la gente participe en los eventos importantes de una nación, la tendencia de los acontecimientos cambiará y las herramientas convencionales tanto políticas como militares se volverán inútiles.

El Líder de la Revolución Islámica señaló que las autoridades de Estados Unidos tratan de detener el gran movimiento popular en Egipto, mientras que la República Islámica se opone a toda interferencia extranjera en el país y cree que se le debe permitir al egipcio decidir su propio destino.

El Ayatolá Jamenei dijo que en la actualidad,  la cuestión más importante en el Mundo Islámico es mantener y mejorar la unidad y evitar caer en la trampa de los extranjeros que tratan de sembrar la discordia entre los musulmanes. «Si el Mundos Islámico se da cuenta de su alta capacidad, las condiciones cambiarían y el Mundo Islámico se convertiría en un poder influyente en el espectro internacional», agregó.

Su Eminencia señaló que el gobierno británico ha sido el autor clave en la incitación a las diferencias entre los musulmanes, por lo que hizo un llamamiento al Mundo Islámico para que dirija todas sus políticas y planes hacia el mejoramiento de la unidad y el poder del Mundo Islámico.

«Occidente siempre ha humillado al Mundo Islámico hasta el punto en que cualquier nación o gobierno que desee ir en contra de dicha humillación - mostrando sus capacidades - se enfrentaría a la oposición de Occidente», agregó.

Sin embargo, el Líder Supremo recordó la clara promesa de Dios de ayudar a los musulmanes, y agregó que cuando uno toma en consideración las condiciones actuales y pasadas de la región y las de las potencias dominantes, se hacen evidentes las señales de la ayuda de Dios.

«¿En qué posición están los Estados Unidos y las potencias occidentales que una vez hicieron de la región un campo para su intransigencia? ¿Cuál es la posición actual del régimen sionista y cuál era su posición hace treinta años? Comparemos la posición actual de Irán con la del pasado. Turquía ha experimentado muchos cambios en comparación a hace treinta años y lo mismo ha sucedido con Irak y Palestina. Todas estas circunstancias son señales de la ayuda de Dios y todo parece que esa ayuda se intensificará aún más rápidamente», agregó.

Por su parte, el Presidente Gul, dijo - en la reunión en la cual también estuvo presente el presidente de la República Islámica de Irán, Mahmud Ahmadineyad - que estaba muy feliz de reunirse con el Líder de la República islámica de Irán, y agregó que Turquía e Irán disfrutan de relaciones bilaterales históricas.

Asimismo, expresó su satisfacción por sus negociaciones en Teherán con las autoridades iraníes, y manifestó su esperanza de que ambos países incrementen la cooperación en diferentes sectores, especialmente en el sector privado, y puedan alcanzar grandes logros.

Por otra parte, el mandatario turco se refirió a los acontecimientos regionales y dijo: «Todo indica que la región está cambiando. Espero que dichos cambios estén a favor de los pueblo de la región.»

Abdullah Gul, también se refirió al énfasis del Ayatolá Jamenei sobre la cuestión fundamental de la unidad entre los países islámicos, y agregó que la unidad está por encima de otros asuntos de la región.»