Cientos de pensadores iraníes participaron en una mesa redonda, el miércoles por la noche. Este grupo de discusión de intelectuales contó con la presencia del Líder Supremo de la Revolución Islámica, el Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, y abordaron el tema de la mujer y la familia en el Islam.
La mesa redonda de 4 horas fue la tercera de una serie de sesiones de intelectuales, que han sido realizadas bajo el lema de «Puntos de Vista Estratégicos de la República Islámica.»
Durante esta reunión se escucharon las ponencias de 10 teóricos iraníes, y su Eminencia señaló que las sesiones intelectuales deben ofrecer procesos profundos, duraderos y lógicos.
El Líder Supremo dijo que el problema de la mujer es parte fundamental de la agenda nacional, y agregó que las fuentes intelectuales del Islam han abordado ampliamente esta cuestión «la cual debe ser presentada como una teoría que pueda ser llevada a la práctica».
El Ayatolá Jamenei destacó el rol de la mujer en el desarrollo y triunfo de la Revolución Islámica, y enfatizó que el Imam Jomeini fue el primero que consideró y entendió cuán significativo puede llegar a ser el papel de la mujer en el social y político.
Su Eminencia señaló que el papel de la mujer también se destaca en la familia, y agregó: «Desde el punto de vista del Islam, la familia es la principal célula de toda la sociedad. Si no hay familias sanas, la sociedad no tiene posibilidades de desarrollarse, especialmente en el ámbito cultural.»
El Líder Supremo de la Revolución Islámica declaró que Occidente ha intentado utilizar el tema de la mujer como un arma en su propaganda política en contra de la República Islámica. Asimismo, el Ayatolá Jamenei exhortó a los intelectuales a contribuir a iluminar la opinión pública mundial respecto al tema de la visión que el Islam tiene sobre ‘la mujer', para que los responsables de las políticos occidentales no alcancen sus objetivos maliciosos de desfigurar y distorsionar el Islam.
Su Eminencia señaló que Occidente evade astutamente la cuestión de la familia, y agregó: «Ellos tratan y utilizan -diligentemente- la cuestión de la mujer, sin embargo, no hacen mención alguna de ‘la familia', ya que quedarían al descubierto.»
El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que la forma en que Occidente trata a la mujer, constituye una violación a la dignidad, y agregó: «Incluso las feministas más extremistas están acertando golpes contundentes al estatus de la mujer, pues a pesar de tener ideas diferentes, con su actitud convierten a las mujeres en una herramienta de placer para los hombres. Es lamentable que la opinión pública occidental haya aceptado y admitido todo esto»
El Ayatolá Jamenei dijo que el Islam no hace diferencias entre hombres y mujeres y los trata como iguales, desde el momento en que ambos son seres humanos.
Su Eminencia señaló que el Islam considera la cuestión de género como un tema secundario, y reiteró: «El Islam enseña que el género limita apenas a definir funciones -dentro de la sociedad- tanto para el hombre como para la mujer, mientras que ambos géneros son iguales en esencia.»
El Líder destacó el papel de las madres y esposas en la sociedad, y agregó que una buena esposa puede ayudar a su marido a convertirse en un elemento útil y eficiente en la sociedad.
El Ayatolá Jamenei dio instrucciones al gobierno para darle prioridad al rol de la mujer en la familia en su planificación, de forma que las mujeres profesionales no se vean impedidas de manejar sus asuntos familiares.