Durante la reunión, el Ayatolá Jamenei dijo que la reciente ola del Despertar Islámico y los eventos del año pasado son indicadores de la cada vez mayor decadencia de Occidente y el aumento del poder del Mundo Islámico.

«Si los miembros de la comunidad islámica en los diferentes países continúan comprometidos con la lucha desinteresada, la resistencia y la confianza en el Creador, Dios definitivamente les ayudará, tal y como hemos presenciado en el último año.»

Su Eminencia describió los acontecimientos del año pasado como una bendición divina, y agregó: «Estos acontecimientos son el inicio del camino y con la ayuda de Dios, habrán mucho más victorias a lo largo del camino.»