Durante los sermones, su Eminencia, explicó que las sanciones dañarán a Occidente, y agregó: «Por ejemplo, en relación con la cuestión nuclear, que en repetidas ocasiones en su propaganda dicen que quieren forzar a Irán a dar marcha atrás mediante la imposición de sanciones .... ¿Qué pasará si no damos marcha atrás? El objetivo de estas sanciones es obligar a Irán a dar marcha atrás, pero Irán no dará marcha atrás. El resultado es que la credibilidad de Occidente y sus amenazas se verán afectadas ante los ojos de las naciones de la región que se han levantado. »

Su Eminencia refiriéndose a las amenazas de Estados Unidos, declaró: «Ellos amenazan -constantemente- diciendo que están considerando todas las opciones, es decir, incluso un ataque militar. Esto es de hecho una amenaza militar, expresada de otra manera. Esta amenaza militar es perjudicial para Estados Unidos y una guerra real sería diez veces más perjudicial para Estados Unidos».

Su Eminencia dijo que estas amenazas muestran que Washington es incapaz de enfrentarse a la República Islámica de una manera lógica, y enfatizó: «Ellos no tienen ningún argumento contra el argumento de la República Islámica. Ellos no pueden obtener ninguna ventaja en el campo de la confrontación lógica e intelectual, por lo que se ven obligados a recurrir a la coacción. Esto significa que la coerción es la lógica de Estados Unidos y solo a través del derramamiento de sangre, pueden promover su postura.»

El Líder Supremo dijo que cuando Estados Unidos recurre a las amenazas y la coerción, su credibilidad se ve debilitada ante los ojos de las naciones, así como ante el propio pueblo estadounidense, y reiteró: «Esto es lo que determina el destino de los gobiernos. Es evidente lo que va a pasar con un gobierno cuya credibilidad se ve debilitada ante los ojos de su propio pueblo. »

«Por supuesto, los estadounidenses y el resto de países deben saber que tenemos nuestras propias advertencias para enfrentar las amenazas militares y sanciones de petróleo y de ser necesario, haremos uso de ellos en el momento preciso », agregó.

El Ayatolá Jamenei se refirió a la reciente carta y declaraciones del Presidente de Estados Unidos y agregó: «Un día, cuando sea necesario, estas cartas se pondrán a disposición de la opinión pública mundial. La gente verá cómo son los estadounidenses. La gente verá el valor y el significado de sus palabras y el valor de sus promesas.»

Su Eminencia refiriéndose a la caída de cuatro de los gobiernos taghuts de la región -durante el pasado año- dijo: «Otro hecho importante es que en Egipto y Túnez, la gente votó por el Islam. En Egipto, alrededor del 75% de la gente acudió a las urnas y votaron a favor de las facciones islámicas. Algo similar ocurrió en Túnez. Estos son puntos muy importantes. El significado de estos acontecimientos es que todos los esfuerzos de los estadounidenses, los occidentales, y la maquinaria propagandística de Occidente, Hollywood y otros medios que promueven la islamofobia y el miedo al gobierno islámico han sido enviados al drenaje. El pueblo apoya el Islam.»

El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que los levantamientos regionales traerán consigo la decadencia y el aislamiento para el régimen sionista, y enfatizó: «Uno de los resultados de estos movimientos es la decadencia y el aislamiento para el régimen sionista, lo cual es muy importante, ya que el régimen sionista es en realidad un tumor canceroso en la región y debe ser, y será, extirpado».

El Ayatolá Jamenei dijo que el pueblo de Bahréin ha sido más oprimido que otras naciones de la región y agregó que hay un bloqueo informativo sobre los acontecimientos de Bahréin. Su Eminencia explicó que este bloqueo informativo será inútil y declaró: «Gracias al favor divino, la nación de Bahréin alcanzará la victoria.»

Su Eminencia desestimó las afirmaciones sobre la interferencia de la República Islámica en Bahréin, y reiteró: «Los gobernantes de Bahréin han dicho que Irán está involucrado en los acontecimientos de esta nación. Esto es una mentira. No, no intervenimos... Si hubiésemos intervenido, las condiciones hubiesen sido diferentes en Bahréin. »

«Cuando nos involucramos, lo declaramos de manera explícita. Estuvimos involucrados en los hechos en contra de Israel, que resultaron en las victorias de las guerras de los 33 días y 22 días. Y a partir de ahora, siempre que sea una nación o un grupo que combata y se enfrenta al régimen sionista, vamos a apoyar y ayudarlo, y no tenemos miedo de decirlo, en absoluto», enfatizó.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica se refirió a los problemas políticos y financieros de Estados Unidos, y reiteró: «La política de Estados Unidos en el Oriente Medio ha sido derrotada. Fue derrotada en lo que se refiere a la cuestión Palestina. Fue derrotada en el caso de Irak. Estados Unidos quería tomar la gestión de Irak en sus propias manos. No lo consiguió. La nación iraquí se puso de pie y no se los permitió. Los estadounidenses incluso decidieron instalar un gobierno títere y fracasaron.»
«Por supuesto que ellos todavía están interfiriendo en los asuntos del petróleo y seguridad, y por la gracia de Dios, el pueblo iraquí y el gobierno harán algo al respecto en el futuro», agregó.

El Ayatolá Jamenei dijo que los gobiernos europeos están sufriendo problemas financieros y políticos también, y enfatizó: «Si un día las naciones europeas se dan cuenta de que la principal causa de sus problemas se debe a que sus gobiernos están siguiendo las políticas de Estados Unidos y la red mundial del sionismo, se pondrá en marcha un gran movimiento social, lo que creará un mundo nuevo.»

Su Eminencia dijo que las sanciones impuestas a la nación iraní son un signo de la debilidad que los occidentales están sufriendo, y reiteró: «Su objetivo era castigar a la República Islámica y al pueblo iraní por estar comprometidos con el Islam ... , pero la verdad es que estas sanciones solo nos beneficiarán ».

El Líder Supremo señaló que la autosuficiencia y confianza en sí misma de la nación iraní se ha debido a las sanciones impuestas por Occidente en las últimas tres décadas, y reiteró: «En cuanto a las sanciones relativas a las armas, si no nos hubiesen impuesto estas sanciones, no habríamos logrado estos sorprendentes avances. En cuanto a la tecnología nuclear, si ellos hubiesen construido la planta de energía nuclear de Bushehr con sus propias manos, nosotros no hubiésemos progresado tanto en el campo del enriquecimiento de uranio. Si no nos hubiesen cerrado las puertas de la ciencia, nosotros no hubiésemos alcanzado desarrollar la investigación con células madre, la industria aeroespacial y el lanzamiento de satélites al espacio.»

En otras partes de sus declaraciones, el Ayatolá Jamenei describió el presente siglo como el siglo del Islam y dijo que el levantamiento de Egipto ha influido en la juventud y los intelectuales de Washington, Londres, Madrid, Roma y Atenas.

«Este es el siglo del Islam y la era de los pueblos, y esto va a dejar su huella en el destino de la humanidad entera», concluyó.