Durante el encuentro, Su Eminencia elogió al pueblo iraní por su grandiosa participación en las elecciones parlamentarias, y agregó que cada voto en las elecciones parlamentarias fue un voto en apoyo a la República Islámica.
«Aunque los comicios celebrados el viernes, eran parlamentarios, cada voto del pueblo fue en realidad un voto a favor del sistema islámico. La presencia de la gran mayoría de la gente en los centros de votación y su gran participación -la cual contó con una de las tasas más altas en los últimos 33 años- mostró que el pueblo confía plenamente en el sistema islámico, enfatizó.
El Líder Supremo señaló que en las elecciones celebradas el 12 de Esfand -y en el ámbito del enfrentamiento con el bando de los enemigos- la gente mostró su poder, el cual se origina en la fuente de su fe, religión y perspicacia, y reiteró: «Con este movimiento masivo, el pueblo ha frustrado las conspiraciones que los enemigos habían estado planificando desde hace meses con el fin de reducir al mínimo el número de votantes.»
«Con su presencia en el escenario de los hechos y con su conocimiento y constancia, la nación iraní ha preparado el terreno para las bendiciones divinas y es necesario dar las gracias a Dios por esto», agregó.
El Ayatolá Jamenei refiriéndose al modelo de la democracia religiosa y la posición de las elecciones dentro de dicho modelo, reiteró: «Las elecciones son un pilar importante del sistema, y ​​la democracia religiosa está fundamentada en las elecciones. Por lo tanto, cualquier persona que cree en el sistema islámico considera que la participación en los comicios electorales es un deber, aunque tuviese objeciones con respecto a ciertos temas.»
«De hecho, todos los que participaron en las elecciones cumplieron con un deber y también mostraron tener una comprensión acertada. Esto es así porque en una democracia religiosa, una persona no puede negarse a participar en las elecciones con el pretexto de que tiene ciertas críticas», agregó.
En otra parte de su discurso, su Eminencia se refirió a los resultados de las recientes elecciones parlamentarias y destacó: «Estas elecciones han sido como una bofetada que ha despertado a ciertas personas que tenían muchas fantasías sobre la República Islámica y su gente. Estos comicios les ha hecho ver la realidad.»
El Líder Supremo de la Revolución Islámica se refirió a las recientes declaraciones del presidente norteamericano y afirmó: «El presidente de Estados Unidos ha dicho que ellos no están pensando en irse a la guerra con Irán. Esta es una buena y sabia declaración que muestra que sus ilusiones se han desvanecido. Pero también ha dicho que van a poner de rodillas a la nación de Irán a través de la imposición de sanciones, lo que demuestra que sus ilusiones en este sentido no se han disipado.»
«La insistencia en esta ilusión perjudicará a los funcionarios del gobierno estadounidense y hará fracasar sus cálculos, porque el bando de los enemigos, particularmente Estados Unidos, ha estado intentando desde hace 33 años que la nación iraní se separe y abandone el sistema islámico mediante la imposición de sanciones y especialmente a través de la intensificación de estas durante el año pasado. Pero el 12 de Esfand, todo el mundo pudo ver el compromiso que la gente tiene con el sistema islámico, », agregó.
El Ayatolá Jamenei señaló que los comicios también demostraron que la gente confían en la República Islámica, y reiteró: «Después de las polémicas elecciones del año 1388, algunas personas llegaron a la conclusión de que el pueblo perdería su confianza en la República Islámica, pero las recientes elecciones han sido una respuesta clara y contundente a esta conclusión equivocada».
Su Eminencia enfatizó que en una democracia islámica todo se basa en el sufragio popular directo, y agregó: «El Islam es el principal componente y en el espíritu de la democracia religiosa no debe haber ninguna desviación del Islam».
«La experiencia que hemos adquirido en los últimos 33 años ha demostrado que el Islam puede traerle dignidad y honor a una nación. Puede definir los objetivos y preparar el camino para alcanzar dichos objetivos. Puede dar lugar a un movimiento científico. Puede producir un movimiento tecnológico e industrial. Puede dar lugar a un movimiento religioso, moral y ético. Puede hacer que una nación se sienta orgullosa frente a otras naciones», reiteró el Líder Supremo.
El Ayatolá Jamenei refiriéndose a la naturaleza de la democracia religiosa, dijo que en una democracia religiosa, la democracia se origina en el Islam, y agregó: «Es un error pensar que la democracia ha sido adoptado de Occidente. Aunque la forma extrínseca de la democracia es la misma en la República Islámica y en los sistemas occidentales, el origen es totalmente diferente.»
Su Eminencia enfatizó que una democracia religiosa respeta los votos de la gente y agregó: «En una democracia religiosa, el sistema es completamente diferente al de la democracia occidental debido a que el sistema de la democracia occidental es opresivo.»
El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que un ejemplo de esta opresión es que en Occidente se considera ilegal negar el Holocausto, al mismo tiempo, a nadie se le permite protestar por los insultos contra el noble Profeta del Islam (PB). O por ejemplo, a las mujeres no se les permite usar el velo islámico en sus centros de trabajo y estudio.