Durante su intervención, su Eminencia se refirió a la importancia del ‘despertar islámico' e hizo un análisis profundo de la postura del Islam, la ley islámica, las condiciones de las personas en los países que han llevado a cabo una revolución y los peligros que enfrentan.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que si los profesores, personalidades destacadas e intelectuales quieren desempeñar un papel importante en el rescate de sus sociedades y contribuir a que estas alcancen la prosperidad, deben demostrar pureza, valor, sabiduría y diligencia y no deben ser codiciosos.

«El ‘despertar islámico' y su influencia en la comunidad islámica es un gran evento que ha penetrado en el mundo entero y que ha dado lugar a varias revoluciones y al cambio de régimen en algunos países», agregó el Ayatolá Jamenei.

Su Eminencia refiriéndose a que el ‘despertar islámico' es un movimiento profundo y generalizado, explicó que los enemigos le tienen tanto miedo a este término, que «están tratando de no dejar que el término ‘despertar islámico' se utilice para referirse a este gran movimiento de actualidad en la región, porque los enemigos están aterrorizados del Islam genuino».

«No le temen al Islam que es esclavo del dólar, el Islam que está hundido en la corrupción y la aristocracia, ni al Islam que no tiene influencia sobre la gente, sin embargo tiemblan de miedo ante el Islam genuino, que cuenta con el apoyo de la mayoría de la gente y que se basa en la práctica y la acción, el Islam que confía en las promesas divinas», agregó el Líder Supremo.

«Creemos que el gran movimiento actual es un verdadero ejemplo del ‘despertar islámico'. Este movimiento continuará en el futuro y no se desviará fácilmente de su camino», reiteró el Ayatolá Jamenei.

Su Eminencia se refirió a las razones por las que se dice que este es un movimiento islámico, y agregó: «Las consignas islámicas de la gente en las revoluciones de la región y el papel de los creyentes musulmanes en la organización de las manifestaciones masivas y el derrocamiento de los regímenes corruptos son una prueba de que este movimiento es islámico en esencia».

El Líder Supremo señaló que los votos del pueblo en favor de los partidos islamistas en las elecciones que se celebran en el Mundo Islámico, es otra de las razones por lo qué este movimiento es ‘islámico', y destacó: «Hoy, si una elección libre se lleva a cabo en muchos de los países musulmanes y si los líderes y políticos islamistas participan en dicha elección, la gente va a votar por los políticos islamistas».

El Ayatolá Jamenei se refirió a la necesidad de identificar los problemas de estos movimientos y revoluciones, especialmente en Egipto, Túnez y Libia, y declaró:

«Además de la identificación de los problemas, hay que definir y destacar los objetivos de estas revoluciones, porque si no está claro cuáles son los objetivos, habrá confusión».

Su Eminencia enfatizó que la eliminación de la hegemonía global es uno de los objetivos del ‘despertar Islámico', y agregó: «Debemos anunciar esto abiertamente porque la noción de que la arrogancia global - encabezada por Estados Unidos - puede llevarse bien con los movimientos islámicos es un error»

«Siempre que el Islam y los partidarios del Islam prevalecen, Estados Unidos por una lado hace todo lo posible para destruirlos, y por otro sonríe amablemente», agregó el Líder Supremo.

El Ayatolá Jamenei dijo que las revoluciones de la región deberían alejarse de la arrogancia global, y reiteró: «Nosotros no decimos que deben ir a la guerra con la arrogancia global, pero decimos que si no se distancian de la arrogancia mundial, serán engañados.»

Su Eminencia dijo que la arrogancia mundial utiliza el dinero, las armas y la ciencia para dominar el mundo, y reiteró: «A pesar de poseer estos medios, uno de los grandes problemas de los países en la occidentales en la actualidad es que no tienen ninguna idea nueva para ayudar a la humanidad. Sin embargo, en el Mundo Islámico hay ideas nuevas y un plan de actuación para ayudar a la humanidad.»

Su Eminencia dijo que el Islam ofrece nuevas ideas y un plan de actuación, y agregó: «Este tema es uno de los puntos fuertes del Mundo Islámico. Si delineamos nuestros objetivos basándonos en estas ideas, entonces el dinero, la ciencia y las armas no le servirán a Occidente, como lo hacían en el pasado.»

El Líder Supremo de la Revolución Islámica manifestó que otro de los objetivos importantes del ‘despertar islámico' es hacer del Islam y la ley islámica el eje de las cosas, y agregó: «Hay un esfuerzo supremo para afirmar categóricamente que la ley islámica no es compatible con el progreso, el cambio y la civilización. Sin embargo, el Islam responde a todas las necesidades de los seres humanos y estará vigente para todas las épocas, por los siglos de los siglos.»

El Ayatolá Jamenei dijo que es muy lamentable el hecho de que algunos movimientos dogmáticos traten de promover la idea de que el Islam no es compatible con el desarrollo, y agregó: «Lo importante en este caso, es promover la idea de que el Islam responde a todas las necesidades de la humanidad.»

Su Eminencia señaló que la construcción de un sistema de gobierno es otro de los objetivos del ‘despertar islámico', y se refirió a una serie de acontecimientos pasados en el norte de África que no pudieron tener éxito debido a la falta de un sistema.

«Si un sistema de gobierno no se construye en los países que han llevado a cabo una revolución, estos se verán enfrentados a grandes peligros», reiteró el Líder Supremo.

El Ayatolá Jamenei enfatizó que otra cuestión importante que se debe hacer con las revoluciones de la región es fortalecer el apoyo popular, y reiteró: «El verdadero poder está en manos de la gente. Siempre que la gente apoye unánimemente a sus líderes, ni Estados Unidos ni los poderes superiores a Estados Unidos podrán hacer absolutamente nada en su contra».

Su Eminencia destacó la importancia de que la gente continúe siendo protagonista de los hechos, y agregó: «Los intelectuales, escritores, poetas y especialmente los eruditos religiosos desempeñan un papel importante en los acontecimientos de la región. Ellos deben ayudar a que la gente se mantenga vigilante, esto lo lograrán a través de la definición de los objetivos, la identificación de los obstáculos, y advirtiéndoles acerca de los enemigos. »

El Líder Supremo destacando la necesidad de la unidad entre los países musulmanes, dijo: «Occidente y Estados Unidos están tratando de crear discordia entre los musulmanes utilizando pretextos como las diferencias doctrinales entre chiitas y sunitas, el origen étnico y la nacionalidad. Por lo tanto, todos debemos estar vigilantes, ser perspicaces y debemos dirigirnos y responder a esta cuestión desde esta perspectiva y adoptar posturas al respecto.»

Su Eminencia enfatizó que a pesar de los esfuerzos y las conspiraciones de la arrogancia mundial, el Mundo Islámico está avanzando, y reiteró: «Uno de los ejemplos de este avance es la guerra de 8 días. Por un lado, estaban los palestinos que vivía en un área muy pequeña -es decir, Gaza- y por otro lado estaba el régimen sionista que afirma tener el ejército más poderoso del mundo. Sin embargo, fue la parte palestina la que estableció las condiciones para el alto al fuego».

«¿Habría alguien creído esto hace diez años?», agregó el Líder Supremo.

El Ayatolá Jamenei elogió al pueblo palestino, Hamas y la Yihad Islámica por su valentía en los acontecimientos de Gaza.

Además, su Eminencia expresó su gratitud a los soldados palestinos por sus sacrificios, esfuerzos y su paciencia.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que la guerra de 8 días en Gaza es una lección importante para el pueblo palestino y para todos los musulmanes, y enfatizó: «La guerra en Gaza demostró que si todos nos mantenemos unidos y somos pacientes cuando nos enfrentamos ante las dificultades, Dios Todopoderoso cumplirá Su promesa de traer el auxilio, la facilidad y la victoria después de las dificultades.»

El Ayatolá Jamenei se refirió a la cuestión de Bahréin, y agregó: «Lamentablemente, el Mundo Islámico no se pronuncia sobre la cuestión de Bahréin. Este silencio se debe a la mala actitud y una visión errónea sobre este tema.»

«Algunas personas tienen un sesgo sectario sobre la cuestión de Bahréin. Según ellos, en cualquier lugar del mundo está permitido protestar y levantarse en contra de un gobierno corrupto, excepto en Bahréin, donde los musulmanes chiitas son oprimidos», manifestó su Eminencia.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica enfatizó, también: «Si queremos adoptar una perspectiva amplia sobre los acontecimientos regionales, debemos tomar en cuenta las conspiraciones y complots del enemigo».

El Ayatolá Jamenei señaló que la postura de Irán sobre la cuestión de Siria se basa en dicha perspectiva, y agregó: «La República Islámica de Irán está en contra de derramar una sola gota de sangre de cualquier musulmán, pero aquellos que han arrastrado a Siria a una guerra civil, a la destrucción y el fratricidio son culpables de la situación que actualmente vive Siria.»

«Las demandas de todos los pueblos deben ser satisfechas de manera convencional y sin utilizar la violencia», reiteró su Eminencia.

En otra parte de sus declaraciones, el Líder Supremo dijo que la formación de los jóvenes y los avances científicos y tecnológicos son temas esenciales para los países islámicos, especialmente aquellos que han llevado a cabo una revolución.

«Esto es posible y la República Islámica de Irán es un vivo ejemplo de ello», enfatizó.

Su Eminencia dijo que «Los países islámicos deben seguir el ejemplo de la República Islámica del Irán a este respecto, y que el Mundo Islámico debe llegar a un punto en que pueda ser considerado una autoridad y una fuente en materia científica.»

Cabe destacar que al comienzo de este encuentro, 7 de los profesores participantes en la Conferencia Internacional sobre el Despertar Islámico, expresaron sus distintos puntos de vista y conclusiones a las que se ha llegado en este magno evento.

Entre estos puntos cabe destacar:

1. La República Islámica de Irán -con el liderazgo del Imam Jomeini- fue la pionera del ‘despertar islámico'.

2. La unidad de los musulmanes es el principal camino para alcanzar la victoria y acabar con las conspiraciones y problemas.

3. El sistema islámico en Irán es el modelo seguro a seguir por los movimientos y las revoluciones de la región, y la base de estos movimientos y revoluciones es el Islam.

4. Es necesario que se tomen posturas claras ante la arrogancia mundial y el régimen sionista, en aquellas naciones en las que han habido levantamientos y suscitado revoluciones.

5. Es necesario poner mayor atención al movimiento científico de los países islámicos.

6. Se debe criticar el silencio de las organizaciones internacionales y el Mundo Islámico ante la masacre indiscriminada del oprimido pueblo de Bahréin.

7. Se debe actuar con suma inteligencia al enfrentarse a las conspiraciones que pretenden desestabilizar la región, especialmente a los países que han llevado a cabo la revolución.