El Ayatolá Sayyid Ali Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica, en la víspera del bendito nacimiento del Imam Mahdi (P) realizó una visita a la feria de producciones culturales, de investigación y religiosas de la Fundación Dar-ul-Hadiz. En esta oportunidad, su Eminencia señaló que la victoria de la Revolución Islámica de Irán (1979) fue un ejemplo para garantizar la veracidad de las promesas divinas sobre un final justo para el mundo con el retorno del duodécimo Imam de los musulmanes chiitas, el Imam Mahdi (que Dios apresure su aparición).«¿Quién podía imaginar el surgimiento de una Revolución fundamentada en los valores y leyes islámicas en un país importante, gobernado por un régimen que contaba con el apoyo total de las potencias internacionales?», cuestionó.
El Líder Supremo de la Revolución Islámico, dijo que los creyentes y seguidores de todas las religiones divinas comparten esta creencia, que la comunidad humana experimentará por fin una etapa feliz y próspera, en la cual reinará la justicia.
Al final de su discurso, el Ayatolá Jamenei enfatizó la importancia para la vida de los seres humanos el tener esperanza en que un día reaparecerá e Imam Mahdi (P), como el salvador de la humanidad.
Previo al discurso de su Eminencia, el director de la Fundación Dar-ul-Hadiz, el Sr. Ray Shari brindó un informe completo sobre las actividades y labores que realiza en esta institución.
El duodécimo Imam de los musulmanes chiitas nació el 15 del mes de shaban del año 255 de la Hégira lunar (869 d.C.) en la ciudad iraquí de Samarra y vivió hasta los 5 años con su padre, el undécimo imam, el Imam Hasan al-Askari (paz sea con él).
Después de que su padre (P) fuese martirizado el 8 del mes Rabi' al-awwal del año 260 del calendario lunar (1º de enero de 874), el Imam Mahdi (P) se ocultó y vivió de esta forma vivió unos 70 años, sin embargo, durante este periodo guió a los creyentes a través de sus representante. A esta etapa -entre el año 260 HL/874 d.C. y 329 HL/939 d.C.-se le llama «ocultación corta».
Después del fallecimiento del último de sus representantes, comenzó la ocultación prolongada del Imam Mahdi (P) que, según la creencia chiita, retornará como un redentor, cuando Dios lo desee y establecerá el gobierno de la justicia y la paz mundial.
Las fiestas que conmemoran el nacimiento del Imam Mahdi (que Dios apresure su aparición) se celebran tanto en Irán como en otros países del mundo.