En el nombre de Dios, el Compasivo, el Misericordioso

Todas las alabanzas son para Dios, Señor de los Mundos, y la paz sea sobre Su Mensajero (PB) y su descendencia purificada (P).

Doy las gracias a Dios -el Altísimo- por darnos la oportunidad de vivir el tiempo suficiente para poder dar inicio una vez más al bendito mes de Ramadán de este año, en esta reunión llena de luminosidad espiritual. Me gustaría dar la cordial bienvenida a todos vosotros, apreciados memorizadores y recitadores del Sagrado Corán, y a las distinguidas personalidades relacionadas con la cultura y las ciencias coránicas -particularmente a los hermanos que hoy han participado en el programa de recitación- y a los honorables huéspedes. Espero que por la gracia de Dios, todos vosotros estéis entre los compañeros del Sagrado Corán en este y en otro mundo.

En mi opinión, lo que las personalidades del ámbito coránico hacen en nuestro país hoy en día es una tarea estratégica e importante. Si bien es cierto que relacionarse con el Sagrado Corán elevará la posición y profundizará la comprensión de aquellos que lo lean y que estén familiarizados con él - esto de por sí ya es algo muy importante, además de las bendiciones que obtenéis por ello vosotros los recitadores y memorizadores del Sagrado Corán- hay otro logro que va más allá de este y cuyo ámbito de aplicación es más amplio. Este logro es ayudar a la comunidad islámica a acercarse a la comprensión y familiarización con el Sagrado Corán y esto es de enorme relevancia e importancia.

Hoy en día, nuestra sociedad coránica, los recitadores y memorizadores del Corán y aquellos que se esfuerzan en este camino, están -de hecho- haciendo estratégico este movimiento, lo cual es muy importante. Es una labor que debe ser valorada adecuadamente.

La verdad es que nuestra sociedad coránica ha hecho afortunadamente un gran progreso en los últimos años. Hemos estado llevando a cabo esta cita anual desde hace muchos años y estoy presenciando el progreso visible de familiaridad con el Sagrado Corán y su recitación entre nuestra gente, nuestros jóvenes y todos aquellos que interesan con ​​en el Sagrado Corán. Estoy viendo el creciente avance de este tema. Es por ello, que debemos agradecer a Dios.

Sin embargo, aún estamos muy lejos del nivel ideal. Esto no quiere decir que el nivel de nuestros recitadores y memorizadores sea más bajo que el nivel ideal. No es esto lo que quiero decir. Afortunadamente, tenemos buenas recitadores y memorizadores de alto nivel, en las distintas disciplinas de la recitación, tanto así que saben transmitirle el significado de las aleyas coránicas al público. Gracias a Dios, nuestro progreso es muy bueno en este sentido.

Pero aún no hemos llegado al punto ideal en un nivel general y la brecha es amplia. Debemos actuar de manera que todas las personas de nuestro país y la sociedad en general se familiaricen con el Sagrado Corán, de manera que comprendan los significados del Corán y que se remitan al Sagrado Corán, incluso si ganan una comprensión limitada de los significados del Corán, esto ya es algo bueno. Debemos llegar a este nivel.

Los países que hablan árabe pasan por esta etapa con mayor facilidad. Pero en nuestro país, quienes no hablan árabe pasan por esta etapa con más dificultad. A pesar de esto, como ya he dicho en repetidas ocasiones, las palabras del Corán son -afortunadamente- familiares para nosotros. Comprender los vocablos coránicos no es algo difícil para nuestro pueblo. Gracias a la misericordia de Dios, familiarizándose aún más y practicando más, se logrará que nuestra sociedad alcance el nivel ideal.

Y vosotros, queridos hermanos debéis prestar atención al hecho de que el gobierno islámico y la comunidad islámica se hacen fuertes desde el interior a través de la familiarización diaria con el Sagrado Corán. Ser fuerte desde el interior es lo que permite a las sociedades retomar sus caminos ideales y les da el poder para hacer frente a los desafíos. Debemos ser fuertes desde el interior.

Esto se logra a la sombra de la familiarización con el Sagrado Corán, porque la familiarización con el Sagrado Corán fortalece la fe, aumenta la confianza en Dios, aumenta la confianza en las promesas divinas, reduce el temor propio a los problemas materiales, les proporciona a las personas la fuerza espiritual y la confianza en sí mismos y les muestra los caminos para acercarse a Dios. Estas son las ventajas y beneficios de familiarizarse con el Sagrado Corán.

El Sagrado Corán es el libro de la comprensión y de la luz: «Nadie va a sentarse al lado de este Corán, sin que al levantarse logre una adición o una disminución - adición en su guía y disminución o eliminación en su ceguera espiritual» [Nahjul Balaghah, Sermón 176 ]. Esta narración es atribuida al Emir de los Creyentes (P). Cuando uno lee el Corán, uno aumenta nuestra perspicacia y sabiduría, y por otro lado disminuye nuestra ignorancia.

Por supuesto, esto se logra a través de la atención y deliberación. El Sagrado Corán debe ser leído poniendo la debida atención. Debemos prestar atención a que una simple formación de sonidos no es suficiente. Debemos leer el Sagrado Corán prestando atención al significado y a los mandamientos del Corán. Si se hace esto, entonces la comunidad islámica encontrará su camino: «Dios es el Protector de los que que creen, les saca de las tinieblas a la luz» [El Sagrado Corán, 2: 257].

Si leemos el Sagrado Corán, vamos a salir de las tinieblas de la superstición, el miedo y las ilusiones y seremos guiados hacia la luz: la luz de la orientación, la comprensión y cercanía a Dios. Estas son las características que se logran cuando se sienta al lado del sagrado Corán y se familiariza con él.

Necesitamos esto. La comunidad islámica necesita esto hoy. La comunidad islámica se enfrenta a serios desafíos en la actualidad. He dicho muchas veces que prestar atención a los desafíos no significa que deberíamos sentir que el enemigo es más fuerte que nosotros. Esto no quiere decir que él nos va a derrotar. Este no es el caso. La comunidad islámica se enfrenta a algunos desafíos. Enfrentarse a los desafíos es una oportunidad para que el Islam -por la gracia de Dios- suba un peldaño más y avance aún más en su movimiento histórico hacia la trascendencia deseada. Hoy en día, estamos en esas condiciones.

Antes de la Revolución Islámica y de la aparición del Despertar Islámico, estábamos acostumbrados a ver que el Mundo Islámico era ignorante. Hoy en día, el Mundo Islámico está alcanzando la sabiduría. Y los acontecimientos que están teniendo lugar en el Mundo Islámico van a ayudar a la comunidad islámica (ummah) a alcanzar la sabiduría. Estos acontecimientos nos hacen más sabios y van a aclarar nuestras responsabilidades. Los enemigos del Islam tienen miedo de la existencia de esta previsión en los creyentes y la ummah. Debemos fortalecer esta previsión día tras día. La primera etapa es conocer estos desafíos.

Lo que se observa en el Mundo Islámico es que los enemigos del Islam están enfrentando el Islam en nombre del Islam y con la ropa del Islam. Esto es lo mismo que dijese nuestro magnánimo Imam (que Dios lo tenga en Su santa gloria): «El Islam estadounidense versus el Islam original del Santo Profeta (PB).»

El Islam estadounidense es el tipo de Islam que hace compromisos con los taghut y el sionismo, y que está al servicio de los objetivos de Estados Unidos. Aparentemente es Islam y le llaman Islam. Pueden observar una serie de obligaciones islámicas. Por supuesto, de acuerdo con lo que hemos oído, los grupos que han surgido en algunos países -recientemente en Irak y antes en otros países- dicen actuar en nombre del Islam y se comportan de tal manera que aparentan ser musulmanes, pero esto no significa que estén actuando islámicamente o cumpliendo con las obligaciones y prácticas islámicas. Sin embargo, no tenemos información precisa al respecto. Lo que está claro es que se mueven en dirección opuesta al Islam.

Desde el punto de vista del Islam, seguir y aceptar la wilayat de los enemigos de la religión y las potencias arrogantes son algunas de las cosas que los creyentes deben evitar: «Quienes creen, combaten por Dios. Quienes no creen, combaten por los taguts.» [Corán, 4: 76]. Si os movéis en el camino de los taghut en nombre del Islam, debéis saber que este tipo de Islam es falso, que no es real y que hay un problema. Hoy en día es esto lo que está ocurriendo.

Por supuesto, podemos ver la mano del enemigo. Debemos entender que la mano del mal de los servicios de inteligencia de los enemigos del Islam juegan un papel definitivo -directa o indirectamente- en la creación de estos eventos y crisis de los musulmanes. Como podemos ver, son ellos los que están dirigiendo la escena. Y las señales y razones para ello son claras. Si la ummah islámica se aproxima a los conceptos coránicos y si logra familiarizarse con este Libro Sagrado, todo este tipo de acontecimientos disminuirá. La relación de los corazones con Dios y su relación con Él no les permitirán traicionar el camino de Dios. Tengo la esperanza de que esto sucederá.

Vosotros jóvenes activistas coránicos y vosotros que pasáis vuestra vida, juventud e invertís vuestra energía en el camino del Sagrado Corán, debéis estar agradecidos con Dios, el Altísimo. Si Dios ayuda a los jóvenes y adolescentes a acercarse al Sagrado Corán y elegir el camino del Sagrado Corán, esto será una gran bendición. Tal cosa no existía antes. En el pasado, el Sagrado Corán no era popular entre los jóvenes y nunca era promovido.

Hoy en día, gracias a Dios se promueve el Sagrado Corán entre los jóvenes. Y vosotros sois uno de los elementos influyentes de esta promoción. Debéis saber valorar esta gran labor.
Los hermanos que están activos en las áreas del Corán deben tratar de «invitar a la gente a la religión con otros medios aparte de sus lenguas» [Bihar al-Anwar, Volumen 67, página 309]. Deben demostrar que están entre las personalidades sobresalientes en términos de compromiso con las obligaciones y deberes religiosos. Deben mostrar esto para que la influencia del Sagrado Corán se manifieste en sus acciones, en su comportamiento público, en su conducta, en aquellos aspectos islámicos que están visibles u ocultos y en la calidad islámica.

Deben observar estas cosas: «Son creyentes solo aquéllos cuyos corazones tiemblan a la mención de Dios, que, cuando se les recitan Sus aleyas, estas aumentan su fe, que confían en su Señor» [El Sagrado Corán, 8: 2]. Los hermanos que se acercan al Sagrado Corán más que otras personas deberían mostrar una señal para disfrutar de estas características. Lo que estáis haciendo hoy -gracias a Dios hoy en día, una señal del Corán es una señal gloriosa- puede ser un buen modelo para los jóvenes, los adolescentes y vuestro público. Ellos pueden aprender de vosotros. Debéis actuar de una manera que ellos aprendan esas cosas de ti que les ayudan a acercarse a Dios.

¡Oh Dios, bendice a Muhammad (PB) y su descendencia purificada (P), mantennos vivos con el Sagrado Corán y en el camino del Sagrado Corán. Haznos ser los compañeros del Sagrado Corán. Haznos morir en el camino del Sagrado Corán. Asócianos con el Sagrado Corán. Haz que el Sagrado Corán esté satisfecho y complacido de nosotros!
¡Oh Dios, bendice a Muhammad (PB) y su descendencia purificada (P) y por la bienaventuranza del alma inmaculada de nuestro noble Imam Jomeini y las almas puras de los mártires, concédenos hoy el favor precioso de esta reunión, estos programas y estas recitaciones!

¡Oh Dios, bendice a Muhammad (PB) y su descendencia purificada (P), fortalécenos en el camino del Islam, el Corán, los mártires y las huestes de la senda de la verdad!
¡La paz, bendiciones y misericordia de Dios sean con vosotros!