En este encuentro el líder afirmó: "La lucha contra los planes de la arrogancia en la región son un ejemplo de la lucha en el camino de Dios." Agregó que se debe enfrentar categóricamente a los esfuerzos de Norteamérica para convertir a los resultados de las conversaciones sobre el tema nuclear en un medio para expandir su influencia en la política, economía y cultura de Irán".

El plan de la dominación (imperial) en la región está basado en dos fundamentos: Primero es la creación de discrepancia y división y la segunda es la influencia en la misma y se lo debe enfrentar ofensiva y defensivamente.

El líder señalo: "Quien sigue a la Familia del Profeta del Islam (b, p y d) debe tener un programa para divulgar el conocimiento Islámico, establecer los mandatos divinos, luchar en el camino de Dios con todas las fuerzas, luchar contra la opresión y el opresor" y enfatizo que "la lucha en el camino de Dios no significa solamente la lucha bélica, sino abarca a un enfrentamiento cultural, económico y político.

Los planes de la arrogancia en la región islámica es uno de los temas que debe conocerse, y saber que es un tema estratégico y sensible en el oeste de Asia y de esta forma estar preparado para enfrentarlos.
El líder señalo que las conspiraciones de la arrogancia en la región durante los últimos cien años tiene un extenso antecedente pero las presiones y artimañas aumentaron tras la victoria de la Revolución Islámica en Irán para impedir que esta experiencia no se repita en otros países.

El sistema de la República Islámica desde hace treinta y cinco años siempre fue objeto de amenazas, bloqueos y presiones en el ámbito d la seguridad y conspiraciones políticas, pero la nación de Irán convivio y se acostumbró a estas presiones.
El Ayatullah Jamenei agrego sobre el denominado despertar islámico en la región del mundo islámico: "los enemigos piensan que han aniquilado el despertar islámico, pero este movimiento sigue vigente y no podrá ser frenado y tarde o temprano mostrara su realidad".

El centro principal de dominación mundial es EEUU y es el enemigo manifiesto. Luego enfatizó que Norteamérica no tiene ningún principio de moral humana y comete crímenes y engaños sin hacerse ningún problema. El líder explicó el plan del enemigo en las condiciones actuales y agregó que este plan tiene dos bases, uno es crear la división y en segundo lugar, influenciar en los países que pretende dominar.

El crear división entre los gobiernos y más peligroso aún, el crear división entre las naciones son sus planes. En este momento el sistema arrogante para crear la división emplea los conceptos de chiita y sunita. Los ingleses son especialistas para llevar introducir la discrepancia y la división y los norteamericanos son sus alumnos.

El líder agregó que la creación de los grupos asesinos, criminales y difamadores, takfiríes (que tildan de incrédulos a los que no piensan como ellos) - que los norteamericanos han confesado ser sus creadores- , son sus mejores instrumentos medios para la división religiosa entre las naciones. Lamentablemente algunos simples e ingenuos musulmanes fueron engañados por este plan y juegan en el campo del enemigo porque no tienen perspicacia y conocimiento profundo.

Ayatullah Jamenei agregó que hoy, la tarea más importante, es esforzarse para poner fin a estas divisiones. Nosotros francamente hemos dicho de modo manifiesto que deseamos tener buenas relaciones con los gobiernos islámicos, especialmente con países vecinos y de la región.

La República Islámica extiende su mano a todos los gobiernos islámicos. Es cierto que algunos países vecinos tratan de hacer diferencias y son obstinados y cometen actos perversos: La base de la conducta de la República Islámica de Irán son principios que el noble Imam Jomeini observó y que le permitieron conducir al triunfo a la revolución islámica y a su estabilidad.

Ayatullah Jamenei dijo que el versículo coránico que describe al profeta y a sus seguidores como: "Severos con los incrédulos, misericordiosos entre sí", es una línea de acción clara para la República Islámica según la cual no podemos tener conciliación con la arrogancia mundial, pero sí con todos los hermanos musulmanes tenemos amistad y compañerismo.

Nosotros cuando apoyamos a los oprimidos no miramos su escuela de religión. El mismo apoyo que les brindamos a nuestros hermanos chiitas en el Líbano también se lo brindamos a nuestros hermanos sunitas en Gaza (Palestina). Nosotros consideramos a la cuestión palestina como la cuestión prioritaria del mundo islámico.

A continuación el líder explicó la confrontación de las políticas islámicas en la región con las políticas de Estados Unidos. Irán apoya a la resistencia en la región, defiende a la resistencia palestina totalmente y apoya a todo aquel que luche contra Israel y aplaste al régimen sionista. Con respecto a las divisiones entre los chiitas y sunitas, el líder afirmó que nosotros no aceptamos ese chiismo que tiene su base de propaganda en Londres y que allanan el camino a los enemigos. Nosotros no los consideramos chiitas.

Apoyamos a todos los oprimidos, entre ellos al pueblo en Bahréin y el Yemen. El líder señaló además, contra las versiones infundadas, que nosotros no intervenimos en los asuntos de esos países pero siempre apoyamos a la gente oprimida. Criticó fuertemente la agresión y las matanzas de los oprimidos en el Yemen y a la destrucción de ese país. Seguir algunos objetivos políticos con estúpidas maneras es la causa de la continuación de los crímenes contra la gente del Yemen.

El líder también se refirió a la Unión de las radios y televisiones islámicas y sostuvo que este organismo es un elemento muy importante para enfrentar a la compleja mafia de los medios norteamericanos y sionistas. Antes del discurso del líder, el secretario general de la Asociación Mundial de Ahlul Bait (P) y el secretario general de la Unión de las radios y televisiones islámicas brindaron un informe de las actividades realizadas por los respectivos organismos.