El Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica, dirigiéndose a una multitud entusiasta de peregrinos del santuario del Imam Rida (P) y los residentes de la ciudad santa de Mashhad en el primer día del Año Nuevo persa, felicitó una vez más al pueblo iraní en ocasión del Nouruz, y enfatizó dijo que la coincidencia del inicio y el final del año 1395 [del calendario iraní] con el aniversario del nacimiento de la noble Fátima Zahra es una fuente de bendiciones para el país.
El Ayatolá Jamenei a continuación dilucidó el lema de este año, que es «Economía de resistencia: acción e implementación».Señalando que la elección del lema para el año 1395 tiene una base lógica y racional, el Líder de la Revolución Islámica invitó a todas las personas, especialmente a los jóvenes, a reflexionar sobre la base deductiva de este lema.
«Tal vez algunos hubiesen preferido que se eligiese un lema cultural o ético-moral para el año en curso, pero considerando la conjunción de cuestiones que enfrenta el país, se decidió elegir un lema económico para este año, al igual que en los últimos años, de tal modo que se promueva como un discurso público e intelectual», reiteró Su Eminencia.
Al explicar la visión general de los asuntos del país, el Líder de la Revolución Islámica dijo: «en la actual coyuntura, los estadounidenses están tratando de inyectar un pensamiento peculiar en [la mente de] las élites de la sociedad y luego en la opinión pública del país, que consisten en que la nación iraní se enfrenta a una forma de doble vía y no tiene otra opción que elegir una de estas dos vías».
«[Su enfoque de] doble vía es que primero, la nación iraní tiene que llegar a un acuerdo con Estados Unidos; o segundo, permanecer constantemente bajo presiones de Estados Unidos y los problemas asociados con dichas presiones», dijo el Ayatolá Jamenei.
Refiriéndose a la «riqueza, herramientas políticas, aparato de propaganda masiva y el equipo militar de Estados Unidos», el Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo: «sobre la base de este pensamiento peculiar, uno tiene que llegar a un acuerdo con un gobierno como el de Estados Unidos y, al aceptar sus imposiciones, retractarnos de algunas posturas, principios y líneas rojas».
«En el reciente acuerdo nuclear que fue rubricado por la comisión negociadora de nuestro país, ocurrió lo mismo. En ciertos casos, el estimado ministro de Asuntos Exteriores [Muhammad yavad Zarif] me dijo: ''no hemos podido preservar ciertas líneas rojas''», agregó.
El Ayatolá Jamenei reiteró: «esto significa que cuando la contraparte es un gobierno como el de Estados Unidos, llegar a un acuerdo con él significa abandonar algunas cuestiones en las que insistimos».
El Líder de la Revolución Islámica reiteró que ciertas personas en el interior del país han aceptado esta peligrosa forma de pensar, es decir, la existencia de un enfoque falso y fabricado de dos vías, y están tratando de convencer a otros a que lo acepten.
«Estas personas dicen que la economía de Irán goza de un gran potencial y que beneficiarse de estas potencialidades no es posible solo con [la aplicación del reciente] acuerdo nuclear, sino que hay algunas otras cuestiones con Estados Unidos, sobre las cuales la nación iraní y los funcionarios del país deben decidir y tomar las medidas precisas».
El Líder de la Revolución Islámica citó el diálogo y la cooperación con Estados Unidos sobre «cuestiones de la región de Asia occidental» y también el «diálogo acerca de las diferencias entre Teherán y Washington sobre la base de que Irán renuncie a sus principios y líneas rojas", como algunos de los casos que este pensamiento peculiar está persiguiendo tras el acuerdo nuclear.
Su Eminencia enfatizó que de acuerdo a este pensamiento peculiar los problemas económicos del país se resolverían y la gente viviría más cómodamente solo si Irán y Estados Unidos mantienen el diálogo e Irán se retracta de sus posturas.
«El verdadero significado de este pensamiento peligroso es que la República Islámica irá poco a poco abandonando sus principios de poder y «de seguridad y las cuestiones fundamentales a las que se apega y que tienen su base en el Islam y en el marco del sistema islámico, como la cuestión de apoyar la Resistencia y el apoyo político a la resistencia de las naciones de Palestina, Yemen y Bahréin. Asimismo, hará que sus posturas sean más cercanas a las demandas de Estados Unidos», agregó el líder de la Revolución Islámica.
Su Eminencia explicó que «sobre la base de este pensamiento peculiar, la República Islámica de Irán -como ciertos gobiernos árabes que descaradamente han extendido una mano de amistad al régimen sionista- finalmente tendrá que ponerse de acuerdo también con el enemigo sionista».
Enfatizando que en el marco de este pensamiento peligroso, el retroceso continuará paso a paso, el Ayatolá Jamenei dijo: «si [Irán] actúa al son de las demandas y deseos de Estados Unidos, la República Islámica tendrá que deshacerse de sus medios de defensa y permanecer constantemente respondiendo a los excesivos y varios porqués de Estados Unidos».
Después de aclarar los diferentes aspectos de este pensamiento peculiar, el Líder de la Revolución Islámica continuó con su patología, y dijo: «entre los temas ignorados en este análisis está el que cualquier acuerdo con Estados Unidos, significaría la obligación de Irán de cumplir sus compromisos y el incumpliendo por parte de Estados Unidos de sus promesas, así como su engaño y argucia en la observancia de los compromisos adquiridos. Actualmente estamos siendo testigos de este problema, lo que se traduce en una verdadera pérdida».
El Ayatolá Jamenei citando la prueba, se refirió al acuerdo nuclear y dijo: «en este acuerdo nuclear, los estadounidenses no han cumplido con lo que habían prometido, y en palabras del estimado ministro de Asuntos Exteriores, ''adquirieron compromisos sobre el papel, que en la práctica evitan cumplir, con subterfugios''».
«Ahora, a pesar de la [entrada en vigor del] acuerdo nuclear, nuestras transacciones bancarias siguen enfrentando problemas y los activos de Irán no han sido devueltos porque los países occidentales y los países bajo su influencia le temen a los estadounidenses», dijo el Ayatolá Jamenei.
El Líder de la Revolución Islámica enfatizó que otro tema ignorado bajo la cubierta del enfoque falso de dos vías es la «razón y la raíz de la hostilidad y el rencor de Estados Unidos contra la nación iraní», y agregó: «dada la posición estratégica de Irán en la región, los abundantes recursos de petróleo y gas, la alta población, los abundantes talentos y su historia antigua, Irán es la flor de la región, pero este país único estuvo bajo el dominio de los estadounidenses durante decenas de años y el pueblo iraní liberó al país de la dominación absoluta de los estadounidenses con la Revolución Islámica».
«La Revolución Islámica no solo liberó a Irán de las garras de los estadounidenses, sino que también promovió el espíritu de resistencia y determinación ante la hegemonía de Estados Unidos en la región e incluso más allá de la región», dijo el Ayatolá Jamenei.
El Líder Supremo de la Revolución Islámica dijo que los estadounidenses consideran a la República Islámica de Irán como el factor principal detrás del fracaso de su política de creación del Gran Oriente Medio y el dominio del régimen sionista en los asuntos regionales, así como de sus fracasos en Yemen, Siria, Irak y Palestina, por lo tanto, su enemistad con la nación iraní está fundamental y profundamente arraigada, y esta enemistad terminará cuando puedan recuperar su dominio sobre Irán».
El Líder Supremo se refirió a las razones detrás del «largo dominio británico sobre Irán, seguido del estadounidense», diciendo: «los británicos y los estadounidenses habían creado fortalezas en este país y a través de ellas perpetuaron su dominio, pero la Revolución Islámica y los jóvenes revolucionarios, destruyeron esas fortalezas y construyeron nuevas fortalezas para salvaguardar la República Islámica y los intereses de la nación».
«Mediante la planificación y haciendo uso de la herramienta de la diplomacia, los estadounidenses están tratando de reparar las fortalezas destruidas y derrumbar las fortalezas de la Revolución», dijo Su Eminencia.
A continuación el Líder Supremo de la Revolución Islámica, enumeró las antiguas fortalezas de los enemigos en Irán:
1) El régimen despótico y diabólico Pahlavi.
2) El miedo a las superpotencias, en particular a Estados Unidos.
Teniendo en cuenta que algunas personas pueden todavía temerle a Estados Unidos, el Ayatolá Jamenei, manifestó: "el miedo del ex régimen déspota de irán a Estados Unidos era razonable porque no tenía ningún apoyo ante Estados Unidos, pero ahora con la República Islámica, el temor a Estados Unidos es irrazonable porque la República Islámica cuenta con el respaldo del gran pueblo iraní».
3) Inyectar falta de confianza en sí mismo y la ausencia del espíritu de autoconfianza nacional.
«Después de la victoria de la Revolución Islámica, esta fortaleza del sometimiento al dominio se convirtió en la gran fortaleza de «Nosotros podemos», agregó Su Eminencia.
4) La separación de la religión de la política.
El Líder Supremo enfatizó que la República Islámica de Irán y el pueblo iraní pueden resistir con la implementación de la «economía de resistencia», y subrayó la necesidad de un plan de trabajo y continuó su discurso ofreciendo diez propuestas básicas para la planificación y la acción en relación con la «economía de resistencia».
Al final de sus discurso, el Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica, se dirigió a los jóvenes iraníes, diciendo: «el país y el presente y el futuro os pertenece, y si vosotros estáis presentes en el escenario de los hechos y os conducís con fe y confianza en vosotros mismos, ni Estados Unidos ni a nadie más poderoso que Estados Unidos podrá hacer absolutamente nada».