El Líder Supremo de la Revolución Islámica, Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, envió un mensaje de condolencia por el acto terrorista acaecido en Kurdistán, que ocasionase el martirio de Mamusta Shaijulislam, representante de la gente de dicha provincia ante la Asamblea de Expertos del Liderazgo.
En el Nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso
«No matéis a nadie que Dios haya prohibido, sino con justo motivo. Si se mata a alguien sin razón, damos autoridad a su pariente próximo...» (Corán 17:33)
He recibido con mucha tristeza y pesar la noticia de que las manos criminales y pecadoras de los lacayos de los reaccionarios arrogantes se han manchado con la sangre del clérigo sabio, combatiente y servidor, el Sr. Mamusta Shaijulislam, representante de la Asamblea de Expertos del Liderazgo.
Y este hombre noble y servidor después de décadas de defender la verdad ha sido martirizado con la mano de los partidarios de la falsedad.
Asimismo -en estos días- otros religiosos valiosos, uno de ellos el Imam interino de la oración del viernes de Sanandak y dos apreciables autoridades del Poder Judicial de dicha provincia, sorbieron el néctar del martirio, antes de este noble hombre.
Esta cadena de sanguinarias desgracias en el bendito mes de Ramadán y en la víspera del día de la defensa de la nación Palestina, es la muestra de que estos criminales -aunque pretenden ser gente de religión y fanáticos religiosos- no sólo irrespetan el mes de Dios sino que el objetivo de su acometida, ciertamente, es el mismo que el del aparato arrogante de algunas gobiernos sombríos de la zona.
Desde el punto de vista de estos mercenarios criminales y los amos opresores que les auspician, el pecado imperdonable de estos queridos mártires, ha sido sentir amor por el sistema de la República Islámica, la defensa de los ideales islámicos y los asuntos de la noble Qods.
Después del perfumado mes de Ordibehesth de este año en Kurdistán, en el cual se escuchó el grito de la unión islámica, sobre todo en los oídos y corazones, el aparato arrogante y déspota ahora está buscando vengarse de esta noble y oprimida gente de esta provincia.
Para estos enemigos de corazón de piedra no hay diferencia entre el kurdo, persa, sunnita ni shiita. Su corazón vil y lleno de odio ha abierto sus manos tiranas, crueles y desgraciadas inclusive contra un clérigo anciano como el oprimido mártir Mamusta Shaijulislam.
Que la maldición de Dios y su fiel mensajero, y la de los creyentes caiga sobre estos sanguinarios, sus centros logísticos y comandancias.
Que la querida gente de Kurdistán conozca a sus enemigos a través de esta evidencia clara y completa, y que los responsables de seguridad de la provincia pongan en como una prioridad en sus programas, el combate enérgico a estos bélicos homicidas.
Expreso mis condolencias y felicitación a la gente de Kurdistán, principalmente a las familias afectadas y honramos la memoria de estos nobles mártires, especialmente al querido mártir Mamusta Shaijulislam, y pido a Dios Todopoderoso, la Misericordia y el Perdón Divino para ellos, y también que les sea otorgado el elevado lugar que se merecen.
Seyed Ali Jameneí