El ayatolá Seyyed Ali Jamenea, Líder Supremo de la Revolución Islámica, se reunió el con los funcionarios del Gobierno, los embajadores de los países islámicos, y cientos de creyentes con motivo de la fiesta de Mab'az que conmemora la designación de Muhammad Ibd Abullah (PB) como Profeta de Dios.
Después de alabar a Dios y mandar salutaciones al Profeta Muhammad y a su descendencia purificada, Su Eminencia manifestó: «Me gustaría felicitar a las honorables personas que nos acompañan esta tarde, a los huéspedes extranjeros presentes en la reunión, al pueblo iraní y en general a la comunidad islámica, en ocasión de la bendita fiesta de Ma'baz. Expreso mis felicitaciones a pesar de que nuestro querido pueblo está pasando por un momento difícil debido a los recientes daños provocados por las inundaciones. En algunos casos, la gente está de luto por la pérdida de sus seres queridos. Hemos sufrido bajas y daños. Espero que a través del favor de Dios, los honorables funcionarios puedan apoyar a la gente como afortunadamente lo han hecho hasta hoy. Espero que por la bendición de este querido día [de Ma'baz], Dios —Exaltado sea— derrame Su gracia y alegre los corazones de todos».
Al respecto, el Líder Supremo destacó: «Afortunadamente, los esfuerzos públicos han sido muy satisfactorios en ese sentido. Pero tampoco es la primera vez. En todos los incidentes y calamidades naturales — que son incidentes que pueden parecer una crisis, pero pueden llegar a ser bendiciones y beneficios divinos— el pueblo iraní entra en acción de una manera valerosa».
Además, el ayatolá Jameneí señaló: «Hemos experimentado esto una y otra vez. Este espíritu de solidaridad entre la gente y su diligencia para prestar servicios a sus compatriotas es excepcional. Y es un incentivo para los funcionarios ejecutivos, y acuden en su ayuda. Lo mismo sucedió en el incidente reciente. Personas de todo el país entraron en acción y ayudaron, y los funcionarios lograron tomar medidas iniciales con unidad, concentración y unanimidad. Por supuesto, aún quedan muchas tareas por realizar».
Su Eminencia manifestó que el propósito de los profetas era establecer una sociedad ideal, y agregó: «Bueno, dicha civilización lo tiene todo. Hay ciencia, moral, estilo de vida y guerra. La guerra también existe en una civilización. Como se puede ver en el Sagrado Corán, hay muchas aleyas relacionadas con la guerra. No es cierto que digamos que el Islam surgió para poner fin a la guerra. Este no es el caso. Lo que importa es la dirección de la guerra: ¿Guerra contra quién? ¿Guerra por el bien de qué? Estas son las preguntas importantes. Los opresores del mundo luchan por sus deseos egoístas, por tomar el poder y por promover la corrupción. Hace muchos años que los sionistas han estado luchando, pero luchan por el bien de sus deseos egoístas. Los creyentes pelean también. Los combatientes palestinos, los combatientes de Hezbollah y nuestra querida gente, también luchan. Lucharon durante los ocho años de la época de la Defensa Sagrada. Sin embargo, tales guerras no se condenan, sino que son dignas de elogio ya que son yihad en el camino de Dios. ''Los que creen combaten por la causa de Dios'' (Corán 4: 76). Este es el punto importante».
El Líder Supremo dijo que hoy también, el Profeta (PB) está comprometido con la designación y misión divina, y explicó: «Cuando leéis el Sagrado Corán, aprendéis una lección y os motiváis a comenzar un movimiento. Esa es la continuación de la designación y misión del Profeta (P)».
El ayatolá Jameneí explicó que cuando el pueblo iraní se mantuvo firme detrás de una gran personalidad como el imam [Jomeiní], cuando atravesó diferentes obstáculos, soportó dificultades, superó varios problemas y avanzó, cuando destruyó la antiquísima estructura putrefacta de los perversos opresores en el área más importante de la región, es decir Irán; y erigió una estructura islámica; esa es la continuación de la designación y misión del Profeta (PB).
«La Revolución fue la continuación de la designación y misión del Profeta. La República Islámica es la continuación de la designación y misión del Profeta. Esto es lo que estamos diciendo. Quien es enemigo de la Revolución Islámica y la República Islámica es enemigo de la designación y misión profética del Islam y del movimiento monoteísta, al igual que los enemigos de los primeros tiempos del Islam», agregó.
Asimismo, Su Eminencia dijo: «Algunas personas dicen que no debemos crear enemigos. No, no estamos creando enemigos. Simplemente estamos diciendo las mismas cosas que el Santo Profeta y Dios dijeron. Solo estamos repitiendo ideas monoteístas. Sin embargo, estas meras palabras crean una serie de enemigos».
Al respecto, el Líder Supremo enfatizó que el enemigo es hostil con el sistema de un movimiento monoteísta, y dirigiéndose a la audiencia agregó: «Dejará de ser hostil cuando abandonéis este movimiento y regreséis al estado que desean, que es adorar y seguir a los perversos. Los Estados Unidos esperan que hagamos esto. Y sus sirvientes también, los sauditas, y sus secuaces en la región, actúan de la misma manera. Simplemente repiten lo que dicen los norteamericanos. De hecho, ''luchan en la causa de los perversos". Son personas que luchan y actúan por y para los opresores perversos ».
Su Eminencia manifestó que la confrontación entre la verdad y el mal y la confrontación entre el monoteísmo y los perversos opresores es inevitable, y enfatizó: «Dios —Exaltado sea— ha decretado que el frente de la verdad sea victorioso. En otras palabras, si el pueblo iraní continúa moviéndose de la misma manera, definitivamente logrará la victoria sobre sus enemigos. Alcanzará la victoria sobre los Estados Unidos: "Nosotros quisimos favorecer a quienes habían sido desfavorecidos en la Tierra y les hicimos dirigentes y les hicimos los herederos " (Corán, 28: 5). Y "Él es Quien ha enviado a Su Mensajero con la guía y con la religión de la Verdad para que prevalezca sobre todas las otras creencias religiosas" (Corán, 9: 33). Así es como son las cosas. Dios —Exaltado sea— lo ha decretado así».
3 de abril de 2019