«Al Gobierno de Cuba, que está en el corazón de América, justo al lado de Estados Unidos, con toda la hostilidad que le profesa Washington, eso aún no le ha pasado y, por más desazón que muestren el Sr. Bush y otros en sus entrevistas, ahí sigue en pie. Yo a veces, cuando leo revistas estadounidenses, veo que no dejan de hacerles caricaturas y burlas, y eso refleja lo que he dicho. Claro está que el Gobierno de Cuba tiene problemas, pero, al gozar de una relativa base popular, al haber luchado junto con su gente y al haber llegado al poder con el acuerdo de la gente, el pueblo a su vez reconoce a Fidel. Yo, que he hablado con él de cerca y largo y tendido, lo veo como una persona de carácter popular; y, si aún no han podido hacerle nada, es por tener su base en la gente» (27/05/1992).