«Con el inicio de la Revolución Islámica, nosotros iniciamos un movimiento. Empezaron grandes cambios en materia de ideales, de vida de la gente, de construcción del país y de educación de las personas. ¿Cuál es el sentido de ese movimiento? Pues, como somos husainíes, el sentido del movimiento lo marcó el imam Husian. En una de las paradas en su camino, el imam Husain (p) se puso en pie y pronunció un discurso: “Ante quien sea testigo de una fuerza opresora y no se posicione contra ella, no tome posición, no se oponga el Altísimo se ha dado a Sí mismo el derecho de reservarle el mismo lugar y el mismo destino que reserva para el opresor: el infierno”. Esa es la cuestión. (…). Eso es lo que tiene ante sí la República Islámica. Esa es la razón de que nosotros no cedemos frente a Estados Unidos y de que, Dios mediante, no nos vengamos abajo frente a la presión propagandística de los embargos: porque es un deber. Si cedemos, Dios el Altísimo nos deparará el mismo destino y el mismo infierno que tiene reservando para el opresor» (13/10/2019).