«Cuando ustedes ven que los organismos de propaganda de la Arrogancia mundial, que son los altavoces que usa la Arrogancia en el mundo entero para sacar adelante sus arrogantes objetivos, mencionan de vez en cuando en malos términos o insultan a algunos países y en particular a la República Islámica de Irán por tener armas, por fabricarlas, por realizar maniobras o por preparar a las Fuerzas Armadas, eso es signo de que la República Islámica ha obrado correctamente al apoyarse en la organización, ordenamiento y perfeccionamiento de sus Fuerzas Armadas y en la fuerza militar. Para un país amenazado por las potencias, la fuerza militar es un imperativo de máxima importancia. Y esto no es hoy en día algo privativo de la República Islámica. Todos los países que quieran protegerse del daño que causan las intervenciones de las grandes potencias deben en primer lugar basar sus sistemas políticos en la gente; en segundo lugar, deben gozar de una fuerza militar popular apta y autosuficiente. Pero ellos no quieren eso» (27/09/1997).