Sin seguridad no habrá avances en la economía, la ciencia, la salud ni la política

La seguridad es en un país la infraestructura básica para todas las actividades orientadas hacia el progreso de ese país. Tanto para las actividades económicas como para las científicas, las relacionadas con la salud y la higiene, las relacionadas con los asuntos políticos y los servicios de todo tipo que se prestan al país y a la gente se apoyan sobre la infraestructura de la seguridad. Si en un país no existe seguridad, se producirán disrupciones en todos sus avances y en todas sus actividades necesarias e indispensables.

Europa necesita garantizar su propia seguridad al margen de la OTAN

La seguridad del país no debe estar en manos de extranjeros. Esto es algo importante (…). Ya han visto ustedes esas disputas recientes entre Europa y Estados Unidos, y cómo los europeos dijeron que Estados Unidos los había apuñalado por la espalda (1). La cuestión es que Europa necesita garantizar su propia seguridad por sí misma, al margen de la OTAN, cuyo pilar fundamental es Estados Unidos. Debe garantizar ella misma su seguridad. En otras palabras, incluso los países desarrollados europeos sienten que les falta algo cuando su seguridad está en manos de una fuerza exterior o depende de una tal fuerza, incluso si en apariencia esa fuerza foránea no les es hostil ―es decir, cuando aparentemente están todos en el mismo grupo―. La realidad es esa, y realmente tienen una carencia. Y en el caso de los países no tan desarrollados cuyos Ejércitos son controlados por las Fuerzas Armadas de Estados Unidos o de otros países similares a Estados Unidos, pues esos están ya cada uno a su nivel (…). Quienes albergan una fantasía respecto a depender de otros, imaginándose que haciéndolo pueden garantizar su propia seguridad, han de saber que se llevarán una bofetada por ello.

La imagen hollywoodiense que se da del Ejército de EEUU no es real

¿En qué consiste el poderío de unas Fuerzas Armadas? Este es un punto importante. El poderío de unas Fuerzas Armadas depende, claro está, de la instrucción, de las innovaciones prácticas, de los diversos progresos científicos, del instrumental, de la disciplina organizativa… Todo eso son cosas necesarias, cada una en su lugar (…). Sin embargo, hay un factor de extrema importancia que es el consistente en el espíritu, la espiritualidad y la rectitud religiosa y moral. Se trata de un aspecto de enorme importancia con un papel extraordinario en el poderío de unas fuerzas armadas. Si en un Ejército no existe ese factor, ese Ejército no podrá, por más equipamiento y medios con que cuente, sostener que es un Ejército con poderío. Ya vieron ustedes cómo entró en nuestro vecino Afganistán el Ejército estadounidense ―pertrechado al fin y al cabo con todo tipo de equipamiento, tanto convencional como por encima de lo convencional, con todo― para derrocar al Gobierno de los talibanes. Permanecieron veinte años en ese país, cometiendo matanzas, perpetrando crímenes, ocupando, haciendo que proliferaran los estupefacientes y destruyendo las limitadas infraestructuras del país. Veinte años después, les han entregado el gobierno a los talibanes y se han ido. Es decir, que habían ido a sacar a los talibanes del poder; se quedaron veinte años en el país de esa manera, en esas circunstancias, cometiendo todos esos crímenes, dejando tantas víctimas, con todo ese coste material y humano, y al final dejaron el gobierno en manos de los talibanes y se fueron del país. Lo que eso significa es que ese Ejército carece de un elemento fundamental, vital, que es el elemento inmaterial de la moralidad, la atención a Dios Altísimo y la espiritualidad. Ahí hay una lección para todos los países.

Tengamos además presente que esa es la naturaleza del Ejército norteamericano. La imagen hollywoodiense que se muestra de los Ejércitos de países como Estados Unidos y similares no es real. La realidad de ese Ejército es esa misma que han visto ustedes.

La presencia de Ejércitos de EEUU en otros países es fuente de guerra y destrucción

Y en otros países donde está presente el Ejército estadounidense, aunque los gobernantes locales no hayan mostrado el celo necesario para expulsarlo, los pueblos lo odian. En todos los países donde está, como por ejemplo los de Asia oriental (2) donde las tropas norteamericanas llevan presentes años, a ojos de esos pueblos son una organización odiosa.

La presencia de Ejércitos extranjeros, incluido el de Estados Unidos, es fuente de guerra y destrucción. Todos deben intentar que los Ejércitos sean independientes, tengan su base en los pueblos y desarrollen sinergias con los demás Ejércitos de los vecinos y del entorno. Va en ello el bien de esta región. No dejemos ni dejen que vengan como garantes de su interés nacional, desde miles de leguas de distancia, Ejércitos extranjeros que no tienen nada que ver con sus pueblos a inmiscuirse en estos países, establecer presencia militar e interferir en sus propios Ejércitos.

Notas

1) La firma de un pacto trilateral de seguridad entre Estados Unidos, Australia y el Reino Unido, que causó la cancelación de un contrato de Francia con Australia para la venta de submarinos, ha colocado al Gobierno francés en crisis diplomática con esos tres países. Dicha firma ha creado tal tensión en las relaciones de Francia con Australia y Estados Unidos que el Gobierno francés la ha descrito como «una puñalada en la espalda». En consecuencia, el presidente de Francia ha reivindicado la independencia de Europa en materia de defensa respecto de Estados Unidos y ha recalcado la necesidad de que Europa no dependa de Estados Unidos en el ámbito de la seguridad y la defensa.

2) En este campo, puede señalarse la presencia militar de Estados Unidos en países como Japón, Corea del Sur, Singapur, Vietnam, Filipinas, Tailandia y Guam. En Japón, además del equipamiento militar instalado, hay cerca de 40.000 militares norteamericanos desplegados en ciento doce bases estadounidenses. Asimismo, hay unos 23.000 militares norteamericanos establecidos en ochenta y tres bases estadounidenses en Corea del Sur, y cuatro mil militares en la isla de Guam.