En un encuentro celebrado hoy miércoles con un grupo de talentos académicos destacados de Irán, el Líder de la Revolución Islámica iraní, su eminencia el ayatolá Jameneí, ha considerado que la guerra blanda del colonialismo actual consiste en hacer que los pueblos olviden sus propios talentos, a lo que ha añadido que, cuando el descuido de las propias capacidades se apodera de una nación, saquearla se vuelve tarea fácil.
A continuación, las partes importantes de las declaraciones del imam Jameneí:
“Lo que distingue a alguien dotado de un intelecto superior no es el mero talento ni la destreza mental, sino la apreciación de esa realidad, de esa bendición. Es algo que debe ser apreciado y a partir de ello hay que trabajar y esforzarse”.
“Un intelecto superior es una bendición divina. Nuestro país está por encima del promedio mundial en materia de capacidades mentales, y esto no es presuntuosidad, sino algo probado”.
“Parte sustancial de la guerra blanda de los colonialistas, tanto hoy como en el pasado, consiste en hacer que una nación dotada de talento ignore esa capacidad propia, en hacer que no le preste atención o incluso en llevarla a tal situación en que ella misma la niegue”.
“Cuando el descuido respecto de la capacidad propia se hace dominante en una nación, saquear a esta se vuelve fácil para los colonialistas. El descuido prepara el terreno al saqueo, y el saqueo incrementa el descuido. Descuido y saqueo van juntos”.
“En el Corán se habla del descuido. El enemigo quiere que olviden sus armas y posesiones (sura An-Nisā’, aleya 102). Ya ven como estos días se plantea en el mundo el asunto de los misiles como cuestión fundamental. Quieren que los descuiden para poder atacarlos cómodamente”.
“En África existieron grandes civilizaciones que, por descuidar sus propias capacidades ―a consecuencia de la guerra blanda que los colonialistas libraron contra ellas―, resultaron completamente aniquiladas. En sus memorias, Nehru señala este asunto a propósito de India”.
“La velocidad de nuestra ciencia debe ser tal que en unos 50 años Irán se convierta en fuente mundial de conocimiento y los demás vean necesario aprender persa para acceder a nuevas ciencias. Esto ya fue así una vez y puede volver a suceder”.