«Cuando yo observo, en lo que más veo incidir es en los esfuerzos del mártir Soleimaní frente a Daesh, ya fuera en Irak o en Siria. Y sí, claro, esa fue una labor muy importante. Daesh fue un auténtico flagelo, lo es todavía, y el mártir Soleimaní intervino bien en ese campo, actuó bien, demostró su valía, puso en práctica en ese asunto todas esas cualidades individuales de las cuales he mencionado algunas y detuvo esa algarada, que no hacía más que crecer, cortando muchas de sus raíces. Fue esta una parte importante del mártir Soleimaní, pero no la más importante, sino una de las labores que realizó. Una tarea más importante a la que se dedicó desde que asumió el puesto fue reforzar el frente de la Resistencia en la región; justo eso que mira con más recelo la Arrogancia. De eso recela EEUU. La labor fundamental del mártir Soleimaní fue en realidad esa, preservar la Resistencia y hacer que creciera, pertrecharla y darle nueva vida en lo material y en lo espiritual. Yo mismo en los discursos de aquellos años señalaba que los palestinos estaban combatiendo a pedradas, y realmente los palestinos en aquel entonces luchaban con piedras. No tenían nada más. Pues bien, comparen eso con la situación que tiene Palestina hoy día, tanto con lo que sucede en Gaza como con lo que tiene lugar en Cisjordania. ¿Acaso es comparable?» (01/01/2023).