Esta presentación fue realizada el lunes en el marco la 34ª edición de la Feria Internacional del Libro de Teherán con la presencia de distintas figuras diplomáticas y culturales de Irán y países latinoamericanos. En este contexto KHAMENEI.IR ha concedido unas entrevistas con los embajadores de Venezuela y Bolivia en Irán, cuyas declaraciones se presentan en siguiente.   

 

  • Entrevista concedida con el embajador de la República Bolivariana de Venezuela en Teherán, José Rafael Silva Aponte

-¿Qué efecto puede tener la publicación del libro Celda n.º 14 sobre el pueblo de Latinoamérica, especialmente, el pueblo de Venezuela?

Bueno, inicialmente, hay que agradecer por haber permitido, haberle brindado el honor a Venezuela por lanzar el libro Celda n.º 14 en versión española en Venezuela. Eso es un honor para el pueblo de Venezuela. Y si va a incidir estas vivencias, primero de un ser humano, si lo vemos, del hombre de carne y hueso, que luchó por sus ideales. Y hoy lo vemos reflejado que es el líder, el Líder supremo de la Revolución Islámica, que todavía sigue luchando ¿Por qué? Por esas conquistas que tuvo cuando estuvo preso, cuando lo exiliaron y ahí estuvo.

Y si es el reflejo, pues, porque es la lucha contra el imperialismo. Aquí podemos ver las vivencias del Líder Supremo, en la lucha contra el imperialismo. Bueno, y en Venezuela estamos en la misma guerra, contra el imperialismo, así como la Revolución Islámica de Irán, como dice nuestro presidente Nicolás Maduro hace un año cuando vino, la Revolución Bolivariana es la hermana menor de la Revolución Islámica de Irán, y ahí se ve reflejado. Ahí está la lucha, aquí la vemos en la parte cultural, en la unión de hermandad de ambos pueblos, de ambos gobiernos, en la parte cultural, como es, este pues es el bautizo, pero aquí del libro. Pero afortunadamente, los tuvimos en la patria de Bolívar y Chávez.

¿Qué opina usted sobre la personalidad del ayatolá Jameneí?

La personalidad, primero, hay que decirlo, un hombre sencillo, un hombre humilde, un hombre de carne y hueso que padeció, sufrió, y ahorita le está dándolo los mejores beneficios a su pueblo.

Bajo su liderazgo, aquí se han visto grandes avances, y nadie en el mundo puede negar los avances científicos, tecnológicos, culturales, en salud, en defensa. ¿Para qué? Como siempre lo han dicho; para mantener a su pueblo, a su nación libre, soberana e independiente, y sobre todo un pueblo y una nación de paz, y lo podemos ver reflejado en todo lo que está sucediendo ahorita, que es como un engrana, es la unión de los pueblos de aquí de la región, y eso se ve, nadie lo puede ocultar.

 

  • Entrevista concedida con la embajadora de Bolivia en Teherán, Romina Guadalupe Pérez Ramos

-¿Qué impacto podría dejar la publicación del libro Celda No. 14 sobre el pueblo de Bolivia?

Bueno, el mismo Líder lo dice en la introducción del libro; cuando dice «espero que este libro sea para establecer un puente con los hispanohablante». Y, lógicamente, el puente está establecido, porque Bolivia, en este caso, hemos vivido una serie de dictaduras militares, donde la prisión, el exilio, las torturas, las muertes, los asesinatos, se daban de la misma forma. Entonces hay una identificación en este caso con el relato de líder y lo que ha pasado en América Latina. Este es un tema que nos hermana. Nos hermana definitivamente, porque es la lucha contra regímenes injustos dictatoriales que lógicamente estaban contra el pueblo.

- ¿Cómo le parece a usted la personalidad del Líder de la Revolución Islámica?

Me encanta. Todas las personalidades, y como bien él dice en su libro, se forjan. Se forjan por las circunstancias, por los contextos en que viven. La única diferencia es que las personas que tienen una fortaleza espiritual, salen, no heridas sino adelante, para seguir luchando, se fortalecen. Eso va a depender mucho de la personalidad. Y lo que nos muestra en la obra, en la narración, es que líder tiene una personalidad de resistencia. Es un creyente, tiene fe, dialoga con el Corán, no solamente ora, pide que le haga pronósticos en situaciones difíciles. Son temas que lo fortalecen.

Entonces, en la prisión, el rayo de luz que hay en una celda que lo enriquece, le llenan el corazón. Entonces, es una personalidad única que se ha forjado en un contexto de lucha, pero tiene una formación ideológica, tiene una formación religiosa, espiritual y un temple. A mí me hacía recuerdo, el acero se templa con fuego. El temple de líderes a fuego. Con el Islam en movimiento, como él dice, no es identificación, lo muestra como una persona que en su tiempo en que se hace la Revolución Islámica, porque además, hay todo un debate en que eran los que tenían principios y valores islámicos, pero eran petrificados, dice él.

En cambio, él dice, yo estaba con la acción, con el Islam en el movimiento. Y es la tendencia del movimiento islámico que hace posible la revolución. Entonces, esa personalidad, el líder, lo que tú me has preguntado, se forjó en la lucha en el acero y él salió muy bien con una dignidad, como dice regresé a Teherán, ingresé con el honor de un Muyahed en el camino de Dios.