En el nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso

Sr. Reza Zabib —el embajador de la República Islámica de Irán en España— le agradecemos. En su opinión ¿Qué posición e importancia tienen los intercambios culturales entre los países, y qué efecto pueden tener en la comprensión de la querida nación iraní?

En el nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso.

Estoy muy feliz de estar a su servicio y espero que las respuestas sean de utilidad para los estimados oyentes y la audiencia. Esta pregunta tiene una mayor importancia en el mundo de hoy, dado que vivimos en la era de la «posverdad», por lo que, en este mundo, —que podría ser necesario dar más explicaciones al respecto en adelante—, la percepción es la base de todo. Los negocios van y vienen, la política es transitoria, incluso, los regímenes políticos cambian, pero, la percepción del ser humano permanece, y en cierto modo, crea la base de los acontecimientos y, en segundo lugar, las comunicaciones entre las naciones; por lo tanto, la consistencia y durabilidad de las relaciones depende de la fortaleza de las relaciones culturales y de las instituciones que se forman en este contexto cultural. Si bien, en los siglos XIX y, especialmente, XX algunos definieron el comercio como el primer índice en las relaciones entre las naciones. Yo creo que en el siglo XXI la cultura es el principal índice que crea la base de los nexos entre los pueblos, por lo que vale la pena invertir más en esta área.

En España o cualquier otro país hispanoparlante en Latinoamérica, aunque me refiero más al propio país Ibérico, en su opinión ¿cuánto conocimiento hay sobre los líderes de la Revolución Islámica; el imam Jomeini (que en paz descanse), y el ayatolá Jamenei?

El flujo de información en el mundo, vinculada a la corriente política, ha sido monopolizada, sobre todo en el siglo XX por la corriente de pensamiento occidental. Por tanto, dirige todos los asuntos y fenómenos en base a la prioridad, la calidad y el ámbito que considere necesario. Este es todo el caso. Por lo tanto, si un fenómeno contrasta con la corriente filosófica y política (occidental), sin duda alguna, no tendrá lugar alguno en la libre transición de la información. En otras palabras, la posición y proporción de los fenómenos, evoluciones y noticias en el flujo mediático mundial, es proporcional a su vínculo con este pensamiento global dominante, es decir, el pensamiento político occidental; cuanto más estrecho es ese vínculo, mejor posición tienen en el ámbito mediático y, al contrario. Hay que ver desde este ángulo los asuntos relacionados a la Revolución y la República Islámica y su posición en el ámbito mediático internacional, aunque, en España, particularmente, hay una buena percepción de la Revolución iraní, porque sucedió casi simultáneamente con los evoluciones culturales y políticas de España, que llevaron a crear un sistema democrático y republicano. La vieja generación recuerda muy bien aquella época con todas sus restricciones, también han comprendido la nueva época. En cierto modo, esa generación tiene muy buena afinidad con la transformación cultural, social y política que tuvo lugar en Irán en el marco de la Revolución Islámica, pero, la generación joven está expuesta a tormentas políticas y mediáticas, y a lo que sea que piensen desde la cuestión nuclear; chantajes en ámbitos como los derechos humanos, hasta la imagen oscura que trazan de los problemas de Irán, incluido el económico. Esta misma noche, en la ceremonia que estuvimos a su servicio, uno de los participantes, procedente de Latinoamérica, decía que yo visité una vez su país y ésta única vez fue suficiente para cambiar toda mi mentalidad hacia Irán, porque todo en mi mente era negativo y negro, incluso las deficiencias y problemas normales, pero, cuando me fui, me di cuenta de que la situación del país persa de ninguna manera era como la narrativa que hemos escuchado miles de veces en Europa y más allá. Esta es la percepción que existe sobre la Revolución Islámica y el Sistema de la República Islámica e Irán, sobre todo en España, esta es una realidad. Tenemos una generación vieja que siente afinidad —con el pueblo iraní—, conoce y comprende muy bien —las realidades de Irán—, y una generación joven que está expuesta a tormentas mediáticas. En general, en países de habla hispana, en otras palabras, en América Latina, la visión mediática del sistema hegemónico ha sido de arriba abajo. Siempre que lo necesitaba, iba allí, recurría al espacio cultural cuando lo necesitaba y, por lo tanto, las condiciones allí —en Latinoamérica— son completamente diferentes. Pero, esta misma situación ha creado un gran entusiasmo —entre los pueblos latinoamerican— para conocer las novedades, más allá de lo que les proporciona la corriente mediática occidental. Allí, cualquier cosa que les sea emocionalmente cercano, les resulta muy atractivo.

Muchas gracias. Usted en sus palabras ha hecho referencia al papel de los medios y la imagen que dan a conocer de Irán. Los oradores que intervinieron en la reunión de hoy también coincidieron en que la imagen que los medios proporcionan del país persa es, desafortunadamente, una imagen negativa, mientras que la realidad es otra cosa. Mi pregunta es ¿qué importancia tienen actividades, como la presentación del libro “Celda N°14” —libro de memorias del ayatolá Jameneí— en un país europeo, como lo que se hizo hoy?, y ¿qué efecto puede tener este tipo de actividades en esclarecer la verdad y borrar la imagen negativa creada por los medios — de Irán —?

Sin duda alguna, cualquier actividad cultural tiene su propio efecto. Hechos como la presentación de un libro, como lo ocurrido esta noche, indudablemente tendrán un efecto, y tal vez sea un suceso considerable a pesar de toda la tormenta mediática y cultural dominante, por lo tanto, este tipo de acontecimientos tienen un valor específico. Pero, la repetición de estos y, más importante aún, la institucionalización de la cultura y la institucionalización de las comunicaciones mediáticas, es algo que da más durabilidad a iniciativas como ésta. En otra palabra, si tales eventos son un accidente y suceden de vez en cuando, es como una sola estrella en el cielo, es hermosa, pero tiene una vida limitada. Sin embargo, hay que cimentar las bases. Las infraestructuras resultan muy importantes, sobre todo, en el ámbito de las comunicaciones y las noticias. El suceso o el fenómeno conceptual que más importa, es la narrativa. En distintas reuniones que he tenido con los medios, he dicho siempre que hay una narrativa dominante estadounidense —en los medios— que no nos beneficia ni a nosotros ni a vosotros y ni a nadie más; pero, sí beneficia a Estados Unidos. Esto no nos importa, lo que debería ser importante para nosotros es que creemos nuestra propia narrativa, una narrativa que sea común y semejante. La narrativa resulta importante y requiere la creación de tales instituciones, las cuales, si se establecen, ofrecen como un manantial su agua clara a los interesados, por lo tanto, espero que llegamos a tal punto, porque Latinoamérica está interesada en la corriente de pensamiento alternativa, en la corriente mediática alternativa. Allí, de hecho, hay un vacío de tal corriente y los medios de comunicación occidentales imponen su propia corriente dominante. Esperamos llegar a un lugar donde podamos presenciar la construcción de instituciones junto con iniciativas culturales distintas.

Usted en su alocución hizo referencia a un punto, quisiera que lo abordemos aquí también, si es posible. Fue el tema de la civilización y las diferencias entre Irán y otros países. En la Declaración del Segundo Paso de la Revolución, el ayatolá Jamenei habló sobre la construcción de una nueva civilización islámica. Por favor, explique un poco al respecto.

Sí. Lo importante en este tema es que la posición real de nuestro Irán en el sistema intelectual esté definida correctamente, o si somos una sola unidad geográfica, un país como otros 200 pequeños y grandes países existentes, o podría ser que nuestra unidad de medida sea diferente. La historia nos cuenta que sí, la unidad de medida de Irán es diferente al de muchos otros países. Dos veces en nuestra historia milenaria fuimos fundadores o accionistas de la civilización. La civilización iraní, iniciada desde un pasado muy lejano, ha sido construida por los propios iraníes hasta el día de hoy, y este es un hecho bien sabido dondequiera que vayas en el mundo; es una marca, como dicen los occidentales. Es sabido en todo el mundo, da igual si te vas al corazón de los centros de investigación para preguntar de ello, o preguntas a una persona en calles de Europa, África, América Latina o en el corazón de Asia. La civilización iraní es una marca, hecha a mano por poderosos iraníes a lo largo de la historia, y sigue teniendo alta credibilidad y valor. (La civilización iraní) También contribuyó al desarrollo de la civilización islámica. Según documentos y realidades existentes, la civilización islámica se desarrolló y fortaleció al pasar por la mentalidad iraní. La revelación divina fue hecha al Profeta Mohamad (la paz sea con él); la nueva religión, el Islam, surgió en la sociedad de la actual península Arábiga, pero creció a nivel internacional cuando pasó por el camino del conocimiento y la civilización iraníes. Aunque el ejército árabe, o en otras palabras, el ejército del Islam, había conquistado nuevos territorios, en ninguna parte de la historia se dice que la civilización se pudo construir invadiendo territorios. Comprender este asunto es muy importante y hace que nuestra medida sea diferente. Entonces, sabemos cómo debemos afrontar el legado de nuestro pasado, qué misión y qué deber tenemos, y si esto se entiende bien, creo que, muchos comportamientos y relaciones deberían ser muy diferentes. El hecho de que cómo define una persona su posición influye, lógica y naturalmente, en su conducta, sus objetivos y sus sueños. Espero que esto se comprenda muy bien, y traiga efectos positivos y bendiciones para nuestro querido pueblo iraní y el Islam.

Y para la última pregunta, quisiera saber ¿qué planes o propuestas tiene para presentar mejor al Líder de la Revolución Islámica al mundo occidental, en particular a España, o promocionar y publicitar su libro? Y como colofón, si quiere añadir algún punto o tema, somos todo oídos.

Este tipo de obras —obras autobiográficas como la ‘Celda N°14’— tienen su propia audiencia en cada cultura y cada sociedad, porque son, de hecho, una narración oral, o la historia oral, y lo que las excepciona es que el propio autor cuenta su historia, es decir, la obra es un relato de primera mano, por lo que no hay duda alguna en su veracidad. No es una obra narrada por otras personas, la historia oral es narrada así. El valor de los relatos de primera mano es varias veces mayor que otras obras, por esta misma razón tienen su propia audiencia. Investigadores y académicos estudian e incluso escriben tesis doctoral sobre este tipo de obras. Estas obras también tienen audiencia entre las destacadas figuras y personalidades, a ellas les interesan estas obras. Todas estas oportunidades se aprovechan para publicar una obra de este tipo, pero yo supongo que —la ‘Celda N°14’— es diferente. Considero este trozo de la historia oral una manifestación, una parte, un ángulo de la raíz de la Revolución, y lo miro así, creo que así es como se debe hablar de ella, y ese es el discurso de la Revolución. Este no es un libro común, es decir, cualquier libro de este tipo no es una obra escrita por cualquier autor y publicada por un editorial. Es un reflejo del discurso de la Revolución Islámica. No es un golpe de Estado lanzado por unos contra otros. Ni siquiera es la superioridad del pensamiento político sobre, por ejemplo, su movimiento rival. Es un discurso. Un discurso surge a grandes intervalos en la historia, se desarrolla, y como se dice hoy en día, alcanza la madurez. Una idea debe ser creada, bien cocida y limada, entrar en la sociedad y luego convertirse en un discurso. Este tipo de obras tienen diferente valor gracias a su discurso y atraen a su propia audiencia. No queremos decir que quien escribió este libre, lo difundió o lo regala, no quiere contar lo ocurrido en Irán en un día o lugar específicos, aunque estos hechos sí sucedieron. Yo creo que, desde este ángulo, es decir, el ángulo discursivo de la Revolución, es importante entender el libro que explica de dónde emanan los incidentes ocurridos en Irán; por qué ocurrieron y a dónde llegaron, esto es más importante del suceso acontecido aquel día, y mirar este tipo de obras.

Muchas gracias dr. Zabib por dedicarnos su tiempo. Le deseo buena salud y esperamos poder volver a realizar este tipo de actividades culturales con su ayuda. Muchísimas gracias.