«EE.UU. ha elegido la peor situación posible en la región de Gaza. Ha hecho que lo odien en todo el mundo (...). Ya en los primeros días de la salvaje agresión del régimen sionista al pueblo de Gaza, los estadounidenses estuvieron yendo y viniendo regularmente; los europeos fueron y vinieron uno detrás de otro sin cesar, y mostraron su solidaridad y su apoyo a los criminales sionistas; lo proclamaron abiertamente. Y no se limitaron a hacer esa proclamación, sino que enviaron armas, procuraron medios y prestaron ayuda de todo tipo. Esas personas que se manifiestan a favor de Palestina en las calles de Londres y París y en el resto de países europeos, en realidad, están proclamando su odio a EE.UU. EE.UU. ha pasado a ser odiado en el mundo. En la región era odiado ya y ahora lo es diez veces más» (20/03/2024).