«El pérfido régimen sionista, que es todo él ruindad, maldad y error de los pies a la cabeza, ha sumado él mismo un error más a sus errores anteriores con el ataque al Consulado de Irán en Siria. El consulado y las dependencias de la embajada se asimilan, cualquiera que sea el país en que se hallen, al territorio del país al que pertenece la embajada. Cuando atacan nuestro consulado, es como si hubieran atacado nuestro territorio. Ese es el uso y costumbre del mundo. El régimen, el pérfido régimen, ha cometido un error en este asunto; debe ser castigado y lo será» (