En este mismo asunto del embargo, del que tanto se habla —en particular durante las elecciones era recurrente en las distintas declaraciones de los candidatos, de la gente, de los partidarios, etc.—, la Asamblea puede intervenir y ser realmente influyente. Sí se puede. Se puede tanto eliminar las sanciones por medios honorables como, aún mejor que eliminarlas, neutralizar las sanciones. Un servidor ha dicho reiteradamente que quitar las sanciones no depende de ustedes —ustedes deben pensar algún tipo de estrategia, [porque] depende de la parte contraria—, pero neutralizar el embargo sí depende de ustedes. Existen métodos apropiados para neutralizar el embargo, algunos de las cuales hemos puesto en práctica y hemos visto sus efectos. Los han puesto en práctica los responsables gubernamentales y hemos visto los efectos, que han sido muy positivos y es algo que puede hacerse. En este terreno, las Asambleas —nuestra querida Asamblea— pueden cumplir un papel.

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Gaza sigue siendo la cuestión primera del mundo islámico. Uno de los ejemplos de lo que he expuesto para la Asamblea sobre asuntos exteriores, actividad en el ámbito diplomático, etc., es la cuestión de Gaza. No se relajen; no se callen. Es una tarea importante. Es verdad que ahora, con el paso de los meses, en muchas personas ya no hay aquel fervor inicial, pero lo cierto es que Gaza sigue siendo hoy tan importante como en los primeros días, ¡si no lo es más! La fuerza de la Resistencia es cada día más visible. Detrás del régimen usurpador sionista, a un grupo de la Resistencia lo está combatiendo todo un aparato inmenso en lo militar, en lo político y en lo económico como es el de Estados Unidos, ¡pero no han logrado ponerlo de rodillas! Y como no pueden poner a Hamás de rodillas, como no pueden poner de rodillas a la Resistencia, se desquitan en la gente; le tiran las bombas a la gente: escuelas, hospitales, niños, mujeres… Se está perpetrando el mayor de los crímenes ante los ojos de las gentes del mundo. Y las gentes del mundo están ya, de hecho, formándose un juicio contrario al vil régimen usurpador. La cuestión no ha terminado. Esto sigue.