«Lo que hicieron nuestras Fuerzas Armadas fue el mínimo de los castigos al régimen usurpador sionista por los asombrosos crímenes de ese régimen, de un régimen sanguinario, de un régimen bestial, del perro rabioso de EE.UU. en la región. Cualquiera que sea el deber que incumba a la República Islámica en este ámbito, lo cumplirá con fuerza, con severidad y con contundencia. En el cumplimiento de ese deber, ni nos demoramos ni nos precipitamos. Fíjense bien: ni demora ni precipitación. No caeremos en la precipitación. Lo que a juicio de los decisores militares y políticos sea lógico, sea sensato, sea correcto, se hará a su debido tiempo, como se ha hecho y como, si resulta necesario, se volverá a hacer» (04/10/2024).