Esta visita fue realizada el día 8 de febrero, aniversario del día en que los empleados de la Fuerza Aérea visitaron al Imam Jomeini y le juraron fidelidad.

El Aiatollah Ali Jamenei insistió en la importancia del, 22 de bahman en el calendario persa, (11 de febrero en el calendario occidental) al decir: "Las ceremonias de celebración de este aniversario en Irán, a diferencia de otros países, son totalmente populares, pues la población está presente, en cualquier circunstancia que se presente. Y este año serán más entusiastas que las de los pasados años y en ellas se les restregará al mundo la voluntad y el apego que el pueblo tiene por la Revolución Islámica."

Aiatol-lah Jamenei subrayó: "En el día 22 de Bahman los que deben entender el nivel de la voluntad y el apego del pueblo iraní a la revolución , ¡realmente entenderán! y por eso la participación en la manifestación de 22 de Bahman es muy importante."

Recordó como elementos principales que engrandecieron al pueblo de Irán durante la Revolución Islámica: el correcto e inteligente pensamiento, una ferviente fe y la valentía en la acción. También dijo: "La Revolución islámica sustituyó la humillación extranjera por el honor, la dependencia amarga y humillante de la era del Taghut por la independencia y la mera sumisión ante los extranjeros por la resistencia y el poder".

El Líder Espiritual aludió asimismo a "la formación de una nueva identidad para el país" tras la victoria de la Revolución Islámica y subrayó: "Al abolir el Estado absolutista hereditario e irracional de la monarquía, la Revolución islámica puso los cimientos de un gobierno democrático y fundamentado en los valores humanos, y con la institución del sistema Islámico fue el modo en que esta nación halló la senda de su progreso."

El líder de la Revolución Islámica con la recomendación de que el pueblo iraní ha pagado los gastos necesarios para acceder al progreso y al apogeo y precisó: "Gracias a la Revolución Islámica, hoy la Nación de Irán es una nación querida e inspiradora. También el sistema de la República Islámica es un sistema potente que todos los poderes tanto regionales como extra-regionales confiesan su grandeza."
El Aiatol-lah Jamenei señaló a la voluntad decidida del pueblo iraní para continuar el camino de desarrollo e insistió: "El resultado de los diferentes movimientos y responsabilidades durante los pasados veintiocho años, ha sido la creación de una marcha ordenada y progresiva para el pueblo iraní; que no se paró por los artimañas de los enemigos y que en el futuro ¡tampoco parará!"

Destacó que el "tono de elogio" de los centros internacionales al hablar de la nación iraní, es el "fruto de la resistencia y de la voluntad del mismo por continuar su senda de progreso", aunque indicó que "algunos centros de tomas de decisiones del mundo se expresan con hostilidad y animosidad mezclada de envidia mientras que otros lo hacen en tono de satisfacción y encomio. Sin embargo, los pueblos musulmanes e incluso, algunos no musulmanes, frente a éstos, en forma unánime todos alaban a la resistencia mostrada por la nación iraní."

El Aiatol-lah Jamenei estimó a las próximas elecciones parlamentarias como uno de los foros cruciales y determinantes, y sobre su importancia añadió: "La evaluación de las anteriores elecciones en diferentes etapas muestra que los esfuerzos propagandísticos hostiles de la arrogancia mundial se enfocaban a reducir tanto la cantidad como la motivación del pueblo para asistir en ellas; sin embargo nunca tuvieron éxito."

Indicó a la miseria de los enemigos frente a la Democracia del pueblo Iraní y señalo: "Quienes con el pretexto de la democracia y la defensa de los regímenes populares matan, conquistan o causan catástrofes; e incluso respaldan a los regímenes golpistas o hereditarios; están obligados a hablar de la falta de libertad y apatía de la gente para participar en las elecciones para menosprecia a la democracia del pueblo Iraní o tratan de evitarlas. Por supuesto, en un época trataron de llevarlo a cabo a través de engañar a la gente pero no lograron sus objetivos."

El líder de la Revolución Islámica consideró la participación en las elecciones como una obligación y un deber nacional y enfatizó:"Este deber no cambia con los distintos gobiernos o los diferentes movimientos políticos. Todos deben obligarse así mismos a participar en las elecciones y en este camino evitar cualquier pretexto!"

Aiatol-lah Jamenei evaluó a las elecciones en el sistema islámico como lo más sano comparando a otros países y añadió:"Recomendé a la administración de las elecciones que deben cumplir severamente la ley .Y que todos deben aceptar las obligaciones legales y ser obedientes. Porque la ley es el límite entre la Verdad y la Falsedad."

Indicó: "en esta misma circunstancia, debemos cuidar que no se oprima a nadie y que no se pisotee el derecho de la gente. A través de la ley, las personas non gratas no deben presentarse y las personas honradas no deben ser privados de sus derechos."

El Líder de la Revolución Islámica evaluó a la participación de la gente como el objetivo principal y enfatizó: "Quienes tienen alguna responsabilidad decisiva y/o ejecutiva en la planificación de las elecciones, deben cumplir sus deberes considerando la importancia de la participación de la gente."

En otra parte de su discurso, Aiatol-lah Jamenei felicitó por la llegada del día 19 de Bahman 1357 (8 de febrero 1978) a los funcionarios de las Fuerzas Áreas del Ejército y al pueblo iraní y describió a su movimiento histórico en ese día, como un punto clave y un movimiento valiente, inteligente, oportuno y surgido de la fe. Asimismo, añadió: "De hecho este movimiento fue el fruto de los sentimientos y la mentalidad de la Fuerzas Áreas del Ejercito de aquel tiempo, en general."

Haciendo alusión a la nueva identidad, poder y grandeza del Ejército después de la Revolución Islámica, a los éxitos de la Fuerza Aérea durante la época de la defensa sagrada y a las grandes obras de ésta después de tal época, señaló: "La Fuerza Área debe continuar en el camino del desarrollo con una múltiple velocidad y en este camino además de utilizar los instrumentos materiales, debe reforzar cada vez más su fe y voluntad."

El líder de la Revolución Islámica, refiriéndose a la situación de Palestina y al estado de sitio y matanza del pueblo de Gaza, consideró que es el resultado de errónea política de EE.UU. en el Medio Oriente y la vergonzosa conferencia del Otoño enfatizando que "los gobiernos islámicos deben cortar el bloqueo de Gaza y en este camino el gobierno y el pueblo de Egipto tienen un gran deber. Simultáneamente todas las naciones musulmanes deben ayudar al gobierno y el pueblo de este país en esta gran responsabilidad."

Aiatol-lah Jamenei añadió: "En las condiciones actuales en las que se encuentra el pueblo de Gaza bajo el rigor del fuego y la sangre, que son el resultado del viaje del presidente de EE.UU. en la región, las negociaciones de los países de la región con EE.UU. y el régimen sionista usurpador no tendrán ningún resultado."

"Los gobiernos árabes deben cuidarse de no ser utilizados tanto ellos como los demás palestinos, en contra del pueblo de Gaza; porque esta infamia quedará con ellos para siempre y nunca se borrará."

El líder de la Revolución Islámica consideró a la resistencia como la única solución para salvar la Nación Palestina y añadió: "La resistencia del pueblo Palestino y de Gaza frente a la gran presión económica, invasión y matanza es admirable. El pueblo Palestino debe estar atento a las conspiraciones que los enemigos les presentan para hacer división entre la Nación y el Gobierno Palestino Electo."