Los días de la Peregrinación (Hayy) son días de esperanza y albricias. Por un lado el esplendor de la unión entre los viajeros a la Casa de la Unicidad crea esperanza en los corazones, y por otro, la renovación de las almas por la bendición del recuerdo de la Casa de la Unicidad, albrician la apertura de las puertas de la Misericordia.