El Ayatolá Seyyed Ali Jamenei, Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán, se encuentra desde el pasado miércoles en la provincia nororiental de Jorasán del Norte, donde realiza una gira por las diferentes ciudades de esta región.
Este día, su Eminencia discursó ante una multitudinaria congregación de entusiastas ciudadanos de Shirvan. Durante, su emotiva alocución el Líder Supremo elogió la perspicacia y conciencia de la nación iraní ante las conspiraciones de los enemigos.
«Durante las últimas tres décadas, todos los complots extranjeros -cuyo objetivo fundamental ha sido crear inestabilidad y discordia entre los diferentes grupos étnicos del país- han fracasado rotundamente, gracias a la perspicacia del pueblo iraní», agregó el Ayatolá Jamenei.
Su Eminencia señaló que los ocho años que duró la guerra impuesta (Irak-Irán, 1980 -1988) por un lado llegó a socavar la estabilidad del país, pero por otro lado hizo que la nación iraní -en su totalidad- se uniese aún más.
El Ayatolá Jamenei reiteró que la República Islámica de Irán ha logrado alcanzar «la paz» y una «estabilidad política ejemplar», gracias a la prudencia, conciencia y perspicacia del pueblo iraní.
Es a través de esta estabilidad que Irán ha superado la escalada de amenazas y sanciones que le ha impuesto y le siguen imponiendo las potencias arrogantes», reiteró su Eminencia.
Asimismo, el Líder Supremo exhortó a los tres órganos del Estado a mantenerse alertas ante las conspiraciones de los enemigos, y agregó: «Las potencias arrogantes están tratando de acabar de una vez por todas con la calma y tranquilidad de nuestro querido país.»
Por otra parte, el Ayatolá Jamenei refiriéndose a las políticas de la hegemonía mundial, dijo: «Las potencias arrogantes quieren causar inestabilidad en los países de la región, a fin de ejercer su dominio sobre ellos»
«Todo, por favorecer a su industria militar, incluyendo sus fábricas de armamentos, cárteles y demás empresas imperialistas», aseveró su Eminencia.